El más directo fue el ministro de Hacienda Felipe Larraín. Aprovechó la inauguración del seminario «Chile en camino al desarrollo» para responder a los twitters del magnate brasileño Eike Batista, en los cuales criticó las condiciones para invertir en Chile luego del fallo de la Corte Suprema que tumbó su proyecto termoeléctrico de Castilla.
Batista había dicho vía twitter, tras el fallo, que invertir en Chile «se está haciendo imposible» y «Si no nos quieren, vámonos! bye, bye !» El séptimo hombre más rico del mundo al parecer se dio cuenta del impacto que sus comentarios podrían tener por que los mensajes fueron borrados rápidamente.
Larraín respondió con molestia: «yo le respondería que mirara las cifras de inversión extranjera entregadas ayer, que revelan 12.300 millones de dólares de inversión en el primer semestre del año, con un 80% de aumento interanual», y terminó con otro dardo hacia el brasileño, que a la vez era una critica a su país: «llamo a los que critican a mirar cómo están las realidades y las condiciones para invertir en sus propios países».
En su participación, el ministro de Haciendo dijo que el tema es un desafío para Chile y el gobierno admite es un problema. «Yo quiero manifestar mi preocupación por ese tema, yo no quiero esconder que tenemos un desafió energético muy importante».
Horas antes, en una entrevista radial, su colega en el gabinete, el ministro de Minería Hernán de Solminihac, también aprovechó de responder a los twitter de Batista, diciendo que Chile «es un país serio» y que «se pueden hacer inversiones».
Hoy en La Moneda, el Presidente Sebastián Piñera firmó el proyecto de una Carretera Eléctrica Pública y anunció que se hará una licitación para levantar línea que unirá el SIC y el SING.
