El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, prepara la presentación del presupuesto 2013, el último 100% de la administración del Presidente Sebastián Piñera, y el que regirá durante el año de las elecciones presidenciales.
En una entrevista en TVN, Larraín aseguró que el proyecto “permite cumplir con todos nuestros compromisos sociales”, agregando que es probable que no se logre establecer un acuerdo con la oposición previo al envío del proyecto que debe ser despachado al Congreso el 30 de septiembre.
El presupuesto tiene un incremento cercano al 5 %, respecto al año anterior y que superará los 60.000 millones de dólares.
Economistas ya critican que el presupuesto podría resultar en un peligroso aumento en el déficit de cuenta corriente, que ya se anticipa podría bordear el 4 % del PIB en 2013.
En la entrevista de TVN, Larraín pidió a los representantes de la Concertación que mantengan el diálogo para que el presupuesto pueda ser aprobado en los plazos que requiere el país.
Afirmó que “debido a que el Gobierno no cuenta con mayorías en las cámaras, el escenario para el Ejecutivo se torna más complicado, porque lo obliga a establecer acuerdos con la oposición”.
En ese sentido, recordó que el año pasado se llegó al día 60 de la tramitación con 29 horas seguidas de legislación “y creo francamente que había una estrategia de llegar al día 60”, pero estimó que espera que se llegue a acuerdos más rápidamente debido a la experiencia de la reforma tributaria.
“Las señales que he percibido, después del llamado que hemos hecho a construir diálogos y confianzas (…) espero una tramitación más expedita”, explicó.
El secretario de Estado también pidió “tranquilidad para todos. Este es un presupuesto responsable, nosotros nos hacemos cargo responsablemente de los compromisos fiscales. Se ha hablado de un crecimiento en torno al cinco por ciento y esto es una manera que tenemos de contribuir a la competitividad de nuestro país, a no presionar al alza la tasa de interés y la inflación”.
Sobre el gasto en publicidad y la postura de la oposición de no entregar recursos para eso que “tenemos el deber como gobierno de informar a los usuarios, hay un deber de información a las personas y eso requiere de recursos. Estos no son gastos de publicidad, sino gastos para informar, y por lo demás gastos que eran bastante grandes en el gobierno anterior”.
Larraín igualmente abordó el tema del Sipco y los cuestionamientos a la iniciativa que excluye que las grandes empresas y aerolíneas paguen el impuesto específico a los combustibles, expresando que “las grandes empresas no congestionan, no usan las vías”.
Respecto al tema energético, Larraín sostuvo que “si queremos que este país sea un país desarrollado, sin pobreza antes del fin de esta década, vamos a tener que solucionar el problema de energía”, y puntualizó que HidroAysén “es un proyecto muy importante que tiene que cumplir con todos los estándares ambientales” y que “puede aportar”.
