Los 10 años de batalla legal del multimillonario Paul Singer con Argentina por bonos impagos acrecientan el espectro de que el país vuelva a suspender los pagos, según indica la negociación de permutas.
El costo de asegurar la deuda argentina contra un impago creció 575 puntos básicos, o 5,75 puntos porcentuales, a 1.533 puntos básicos, desde que una corte de apelaciones de los Estados Unidos ratificó el 26 de octubre dictámenes de tribunales inferiores que impiden al país pagar su deuda si no honra las obligaciones con los acreedores que no aceptaron la reestructuración, tales como Elliott Management Corp. de Singer. El multimillonario, que reclama US$1.600 millones producto del impago argentino de 2001, rechazó ofertas de canjear los pagarés a 30 centavos por dólar y quiere que el país le pague el total.
La percepción del riesgo de que Argentina suspenda los pagos a sus acreedores es ahora la mayor del mundo en tanto se especula que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner optará por suspender todos los pagos de deuda en dólares en lugar de llegar a un acuerdo con quienes se mantuvieron al margen de la reestructuración, lo cual generó un aumento récord de sus permutas de riesgo crediticio. Si bien los costos crediticios del país son de más del doble del promedio de 4,72 por ciento de los mercados emergentes, Argentina podría estar dispuesta a suspender los pagos por segunda vez porque está excluida de los mercados de deuda internacionales desde su impago de US$95.000 millones, según Goldman Sachs Group Inc.
“Hace muchos años que los critican y le dicen a todo el mundo que nunca negociarán con ellos, por lo que ahora les resultará difícil dar un giro de 180 grados”, dijo Alberto Ramos, un economista de Goldman Sachs, en entrevista telefónica desde Nueva York. “No tienen mucho que perder cuando ya están excluidos de los mercados de financiamiento privados”.
Probabilidad de impago
El secretario de Finanzas, Adrián Cosentino, no contestó un mensaje telefónico de Bloomberg en el que se le solicitaban declaraciones.
Peter Truell, vocero del fondo de cobertura Elliott Management, que tiene sede en Nueva York, se negó a hacer declaraciones sobre la decisión de la corte.
Argentina no puede hacer pagos de la deuda soberana reestructurada si se niega a pagar a los tenedores de sus bonos impagos luego de que la Corte de Apelaciones de los Estados Unidos en Nueva York dictaminara el 26 de octubre que el país no puede discriminar entre sus tenedores de bonos.
La decisión ratificó el dictamen del juez de distrito de los Estados Unidos Thomas Griesa en Manhattan.
Las permutas de riesgo crediticio de Argentina implican un 66 por ciento de probabilidades de impago en el transcurso de cinco años, sobre la base de que los inversores recuperarán un 25 por ciento del valor nominal del bono. Eso supera el 41 por ciento de probabilidades de impago de la deuda venezolana, según datos que recopiló Bloomberg.
Las permutas de riesgo crediticio pagan al comprador el valor nominal a cambio de los valores subyacentes o el efectivo equivalente en el caso de que un gobierno o una empresa no cumpla con los acuerdos de su deuda.
‘Posibilidad real’
“Ahora hay una posibilidad real de que se bloqueen los pagos de bonos y de que eso lleve a un impago completo”, dijo Joe Kogan, jefe de estrategia de deuda de mercados emergentes de Scotia Capital, en entrevista telefónica desde Nueva York. “Eso atemoriza a los tenedores de bonos”.
La brecha de rendimiento entre los bonos argentinos y los bonos del Tesoro de los Estados Unidos se amplió 37 puntos básicos, a 1.024, la mayor cantidad entre los mercados emergentes después de Belize, según JPMorgan Chase Co. Los bonos gubernamentales con vencimiento en 2033 se desplomaron 9,75 centavos, a 69,67 centavos por dólar, la mayor caída desde que se emitieron los valores en la reestructuración de la deuda del país en 2005.
“Argentina no tiene mucho respaldo en este momento, y cabría esperar que los precios de los bonos sigan cayendo”, dijo Boris Segura, un estratega para América Latina de Nomura Securities International Inc. “Las autoridades están contra la pared”.