Sigue acumulándose evidencia de que el presidente del Banco Central tenía razón cuando el mes pasado advirtió que estaba viendo las primeras señales de una desaceleración de la economía.
El Imacec de marzo publicado ayer es una señal importante, ya que mostró una economía creciendo a su nivel más lento en casi dos años.
La actividad económica se expandió un 3,1 %, muy por debajo de las expectativas del mercado y es el segundo mes consecutivo que crece por debajo del 4 %. Las cifras apuntan a que en los primeros tres meses del año la economía creció 4,4 %, el crecimiento más bajo desde el tercer trimestre de 2011.
Las proyecciones de analistas y agentes del mercado para el tercer mes de 2013 apuntaban a un 4,7 %, e incluso la apuesta de los consultados en la última encuesta de expectativas económicas se elevaba al 4,8 %.
El gobierno culpó a la huelga portuaria y manifestaciones por las débiles cifras. El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, dijo que "en este Gobierno hemos logrado que esta economía vuelva a crecer en torno al 6 por ciento, pero es muy difícil mantener un crecimiento del 6 por ciento especialmente en un mundo que está con los problemas que tenemos, si además no hacemos las cosas muy bien internamente", agregando que "es por eso que quiero dar un mensaje a las chilenas y chilenos: cuidemos lo que tenemos y entendamos que las manifestaciones, paros, huelgas, ilegales algunas de ellas, están afectando la capacidad de crecimiento de nuestra economía".
Para varios economistas, las cifras son un aspecto sobre el cual poner atención. Bice Inversiones corrigió a la baja sus perspectivas para el resto del año y ahora proyecta un crecimiento por debajo del 5 %.
"Luego de presentar un fuerte crecimiento en enero, la economía evidencia avances inferiores a 4,0 % en los dos períodos siguientes", explican sus analistas en un informe para sus clientes, agregando que "en términos de la serie destacionalizada, creemos que la actividad habría perdido dinamismo en el periodo mencionado, por cuanto ésta presenta un aumento trimestral de sólo 4,1 % en términos anualizados, siendo claramente inferior al crecimiento de tendencia".
El Banco Central, en su informe, explica que las cifras de marzo se vieron afectadas principalmente por los dos días laborales menos que tuvo el mes en comparación con el 2012.
Pero incluso tomando en cuenta ese factor, la serie desestacionalizada no registró variación en marzo respecto de febrero y aumentó un 4,7 % en comparación con igual mes del año anterior, mientras la serie de tendencia ciclo registró un incremento anual del 4,2 %.
Para el economista jefe del Banco Penta, Matías Madrid, "el crecimiento en los meses más próximos debería ubicarse entre 4,5 % y 5 % para luego converger a la parte baja de ese rango, por lo que mantenemos nuestra proyección de crecimiento para 2013 en 4,7 %".
El año pasado la economía creció un 5,6 %, y las previsiones del Banco Central para este año se sitúan en un rango de entre 4,5 y 5,5 %.
Madrid apunta a que la inversión es el componente que está registrando la desaceleración más pronunciada. Algo con lo que concuerda la Cámara de Comercio de Santiago (CCS).
El pasado 2 de abril, Vergara afirmó que la economía estaba mostrando sus primeras señales de desaceleración. La demanda interna se enfrío y los bancos se pusieron más estrictos en otorgar créditos.
Para Felipe Hernández, economista del Royal Bank of Scotland, las cifras del Imacec "son una señal más de que la economía está comenzando a desacelerarse y probablemente implique que el Banco Central se moverá a un sesgo menos agresivo y más neutral en sus política monetaria". El comentario lo hizo en una entrevista con Bloomberg.
Actualmente la TPM del Banco Central es la más alta de la región después de Brasil (5%).
El Imacec de marzo no eclipsa el hecho que el consumo sigue creciendo. En abril se disparó a 10,2 %, a pesar de que la manufactura cayó un 3 % y el sector industrial ha casi dejado de crecer.
