Los operadores están apostando a que habrá apenas un 1 por ciento de probabilidades de que la Corte Suprema estadounidense atienda la causa de Argentina contra los acreedores conocidos como “holdouts” (los bonistas que no entraron en la reestructuración de deuda en 2005), lo cual está empujando los rendimientos relativos de los bonos emitidos conforme la ley de Nueva York hasta un mínimo en ocho meses.
Los rendimientos de deuda de Argentina denominada en dólares con vencimiento en 2038, que están sujetos a un fallo de la justicia estadounidense por la deuda impaga del país, cayeron 0,38 puntos porcentuales hasta 11,32 por ciento en el último mes, la disminución más grande desde octubre. Pagarés de igual vencimiento regidos por la legislación local subieron 0,50 puntos porcentuales hasta 11,67 por ciento. El descuento, que surgió el 18 de julio, alcanzó 0,49 puntos porcentuales el 23 de julio, el más grande desde diciembre, según datos compilados por Bloomberg.
Si bien la Corte Suprema concede sólo 1 por ciento de las aproximadamente 8.000 peticiones que recibe cada año, los llamados bonos Par están recuperándose en medio de versiones de que el apoyo de Francia a los bonistas reestructurados de Argentina elevará la probabilidad de que la Corte Suprema acepte el caso, según Greylock Capital Management LLC. En tanto los inversores esperan la decisión del alto tribunal y el fallo de una corte de apelaciones para determinar cuánto deberá pagar el país a los “holdouts”, la probabilidad de una suspensión inminente de los pagos de deuda se redujo, dijo la empresa.
“El movimiento del precio demuestra que hay una menor preocupación por una cesación de pagos”, dijo en una entrevista telefónica desde Nueva York Diego Ferro, codirector de inversiones en Greylock Capital Management, que administra US$500 millones en deuda de mercados emergentes que incluye los bonos argentinos con vencimiento en 2038. “Cuando la demanda por Argentina crece, el margen va a favor de la ley de Nueva York y ocurre lo contrario cuando hay una liquidación. Yo no tocaría la ley local”.
Ferro dijo que la brecha continuará desviándose hacia los 100 puntos básicos, o sea 1 punto porcentual, hasta el dictamen. Si el fallo es positivo, la diferencia podría ampliarse hasta 200 puntos básicos, dijo.
El litigio no resuelto del país con los acreedores ha empujado los costos de endeudamiento hasta 13,38 por ciento, casi tres veces la media de 5,92 por ciento de los mercados emergentes.
El rendimiento extra que exigen los inversores por tener deuda argentina en vez de bonos del Tesoro estadounidense cayó 25 puntos básicos hasta 1.069 puntos básicos ayer, según JPMorgan Chase Co.
Las permutas de riesgo crediticio a cinco años de Argentina, contratos que protegen a los tenedores de deuda del país contra un incumplimiento de pago, cayeron ayer 21 puntos básicos hasta 2.340 puntos básicos, según datos compilados por CMA Ltd.
Desde marzo, los inversores habían preferido los bonos regidos por el derecho local en razón de que no están sometidos a un dictamen de un tribunal de Nueva York que pueda alterar los pagos si Argentina ignora las órdenes de pagar en su totalidad a los bonistas que no ingresaron en la reestructuración de 2005 luego de su cesación de pagos en 2001 sobre US$ 95.000 millones, como NML Capital Ltd., una unidad de Elliott Management Corp. del multimillonario Paul Singer.