Puso en marcha un juego de ajedrez apenas conoció el 6 de septiembre de 2013 la acusación de la SVS de violar la Ley del Mercado de Valores y la Ley de Sociedades Anónimas.
Incidencias administrativas, en tribunales e incluso en Contraloría han sido parte de las acciones tomadas por Jorge Bofill, Raimundo Labarca y Alejandro Parodi frente a los duros cargos del superintendente de Valores y Seguros (SVS), Fernando Coloma, que le apuntó con el dedo como creador del esquema de compra y venta de acciones de SQM y las sociedades cascadas que Ponce controla.
A fines de enero pasado, cuando la SVS hizo estallar la seguda bomba del caso con cargos contra Leonidas Vial, su corredora LarrainVial y sus ejecutivos principales, además de Banchile, Citigroup y otros actores del mercado de capitales, Ponce Lerou recibió una de las mejores noticias: se suspendía el procedimiento que podría llevar a sanciones en su contra.
Pero Ponce tiene varias aristas en juego. Antes había denunciado a Coloma y los principales profesionales a cargo de la investigación del caso Cascadas, por prevaricación y abuso de particular.
El Ministerio Público investigó, llamó a declarar a los abogados de ambas partes y a los involucrados. Sólo quedaba que prestara su testimonio el interesado, Julio Ponce. Pero no apareció esta semana como se preveía.
Lo hará el 3 de marzo próximo, una semana antes que Fernando Coloma deje su cargo, si es que no se confirma la posibilidad de que Michelle Bachelet le proponga seguir en la SVS para concluir el bullado caso.
El controlador de SQM nunca ha estado presente en alguna declaración, tanto en sede judicial como administrativa, pues sólo ha contestado por oficio los cargos de la entidad que dirige Fernando Coloma. Según Radio Cooperativa, la semana pasada fue visto en un torneo ecuestre en Osorno.
La postergación de su declaración generó iracundas declaraciones de los abogados de Coloma, así como de Mauricio Daza, abogado del misterioso accionista minoritario de SQM, Roberto Lobos.
Paula Vial, que defiende a Coloma, dijo que el retraso confirma lo que presumen desde hace tiempo: que Ponce sólo busca "dilatar el proceso y distraer de aquello que en realidad es el foco principal de sus preocupaciones, de su atención, que es el proceso administrativo que se sigue en la Superintendencia". Además, advirtió que ni Ponce ni sus abogados han presentado un sólo documento que sustente sus acusaciones.
Daza fue más allá y dijo que la SVS no se puede quedar de brazos cruzados y debe querellarse contra el empresario.
"Nosotros consideramos (que esta causa) debiese terminar con un sobreseimiento definitivo y una posterior querella por acusación calumniosa que debiese intentar el superintendente Coloma en contra del señor Ponce Lerou", apuntó.
En su opinión, "no es aceptable que se ocupen esta clase de estrategias para poder levantar una defensa respecto de casos graves, como los que se le asignan al propio señor Ponce, respecto a manejar un esquema fraudulento durante años a partir del cual se enriqueció a costa, entre otros, de las AFP y, por lo tanto, de los cotizantes".
El caso en tanto sigue su curso. En los próximos días, las defensas de los acusados por Coloma en la segunda formulación de cargos debieran hacer llegar sus descargos a la SVS. Luego de esto, se abrirían periodos probatorios, donde se unirá el procedimiento a los cargos de Ponce y su círculo cercano, acusados en septiembre pasado.
