Después de unos meses sin hacer apariciones públicas, el economista y ex presidente del Banco Central volvió a la luz pública, dando una entrevista al diario del "establishment".
En una extensa conversación, De Gregorio hace un análisis de los desafíos económicos que enfrentará el nuevo gobierno de Michelle Bachelet, critica al que recién sale, defiende sus credenciales de progresista y no descarta entrar al gobierno si se lo piden. Cabe recordar que él fue parte del programa económico de la campaña de Bachelet.
En la entrevista, el ex presidente del Banco Central entró de pleno en la coyuntura: "No hay argumentos sólidos que impidan hacer una reforma tributaria en un periodo de desaceleración", sentencia, agregando que lo importante es que que "el timing de los ingresos y gastos sea adecuado".
Dice que con el argumento de que la desaceleración hace recomendable postergarla, "nunca haríamos nada".
Es optimista acerca de la forma que tendrá la versión final de la reforma tributaria y está de acuerdo con la eliminación del FUT, aconsejando "no perjudicar a las PYMES".
"Como se ha pensado, soy muy optimista. Es de esperar que en el Congreso la discusión esté a la altura", señala en la entrevista.
Con respecto a la pelea del actual gobierno con el de Piñera acerca de quién es responsable de que en la economía haya una desaceleración, dice que mucho más importante para lo que está pasando en la economía es el ciclo. "El gobierno que acaba de salir tuvo un impacto marginal sobre el crecimiento y un impacto marginal sobre la desaceleración".
Dice que la calles "tiene una voz que hay que escuchar. Lo importante es que a partir de la voz y las demandas de la calle, convertirlas en políticas públicas razonables".
