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El complejo escenario en que se deberá mover Juan Andrés Camus al frente de la Bolsa

Héctor Cárcamo
Por : Héctor Cárcamo Periodista El Mostrador Mercados
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“Tanta cámara”, dijo sorprendido Juan Andrés Camus ayer, pasado el mediodía, al aparecer frente a la prensa presentándose como el nuevo  presidente de la Bolsa de Comercio de Santiago (BCS).

Pocos minutos antes, el nuevo directorio lo había ratificado como nuevo timonel del ruedo, reemplazando al histórico Pablo Yrarrázaval. 

El presidente de BTG Pactual Chile asume con el organismo cuestionado a raíz del caso Cascadas y tendrá que lidiar con la presión de la SVS y los conflictos de interés –tanto personales como los del propio directorio– que podrían dificultar su trabajo.

El desafío Cascadas

El nuevo presidente de la Bolsa se estrena en medio del caso más bullado para el ruedo en los últimos años: Cascadas.

Es más, sin dicho caso, lo más probable es que él no sería hoy presidente del directorio. El asunto Cascadas puso en el banquillo a la forma en que opera la Bolsa, junto con gatillar una batería de críticas, las que terminaron por forzar al organismo a aceptar hacer cambios, así como con la salida de su presidente histórico, Pablo Yrarrázaval.

El escándalo también desencadenó la salida del directorio de Leonidas Vial, socio de LarrainVial. El reemplazante fue su socio en la corredorara, Fernando Larraín Cruzat. La SVS alega que Vial y la corredora fueron parte del esquema "engañoso" ideado por Julio Ponce, controlador de las Cascadas, que generó ganancias para él y su círculo, perjudicando a los accionistas minoritarios.

Camus asume justo en el momento en que la temperatura en el caso comienza a subir.  Este medio tiene entendido que, como parte de su defensa, los acusados en el caso llamarán a la Bolsa a declarar sobre la legalidad de las operaciones y la entidad deberá pronunciarse teniendo en su seno a LarrainVial y Banchile –éste del grupo Luksic–, cuyo representante Rodrigo Manubens también participa en el directorio.

Camus afirmó que esperarán las preguntas, aunque advirtió que las transacciones fueron legales, además de señalar que no se puede calificar el espíritu de las operaciones, contrariando lo señalado por la SVS en cuanto a que las transacciones cuestionadas aparentemente cumplían la norma, pero no el sentido de la misma.

“Cuando nos llamen veremos cuáles son las preguntas, pero nosotros creemos que las transacciones fueron efectuadas dentro de la normativa vigente. Por lo menos es lo que hemos mirado con detalle y así lo hemos visto… no puedo juzgar el espíritu con que se hacen las cosas”, refutó.

También fue hábil para enfrentar el conflicto de interés en el caso. “Creo que la libertad es una cosa, conflicto de interés no sé, hay que ver cuál es la pregunta, porque uno los conflictos los puede tener según cuál sea la pregunta. Si pregunta si se hicieron dentro de la normativa, sí”, recalcó, agregando que no se deben adelantar juicios hasta que no concluya la investigación.

Contradicción

La opinión de Camus dista de lo que, por distintas vías, ha expresado Celfin –hoy BTG Pactual Chile– en el pasado. La evidencia más palpable es la carta enviada a El Mercurio en junio de 2009 por Rafael Ariztía, ejecutivo de Celfin, en la cual cuestiona abiertamente operaciones con las Cascadas por parte de Ponce y que habían sido intermediadas por LarrainVial. Fruto de la investigación, luego se supo que en el negocio había participado Leonidas Vial.

BTG Pactual Chile envió una carta a este medio, asegurando que dicho reclamo público de Ariztía había contado con el consentimiento de Camus y de Jorge Errázuriz, publicando incluso los correos en donde la visión del socio de Camus quedaba en evidencia. 

Asimismo, un ejecutivo histórico de la corredora le ha dicho a El Mostrador Mercados, en al menos dos ocasiones, que al interior de BTG Pactual Chile hay casi unanimidad de opinión respecto a que las operaciones de Ponce, Leonidas Vial y LarrainVial eran cuestionables y que en más de una ocasión en el pasado se lo hicieron saber a las autoridades.

El desafío para Camus será conciliar su nuevo rol con el de Presidente de BTG Pactual Chile. Algunos actores del mercado no descartan que Camus, eventualmente, se vea obligado a elegir entre uno de los dos. 

El nuevo directorio no será fácil de manejar. Los dos representantes de la banca –Álvaro Donoso y Hernán Somerville (este último ratificado en su cargo en desmedro de Juan Andrés Fontaine, cuya salida fue una sorpresa)–, y el representante de los accionistas pasivos no corredores, Pedro Salah, tienen visiones distintas sobre el futuro de la Bolsa y los cambios que hay que hacer. Y su vicepresidente, Eduardo Muñoz, ha manifestado en público que no ve la necesidad de hacer cambios radicales.

Juego de piernas

Camus deberá manejar los intereses de cada uno y, al mismo tiempo, encabezar cambios que no sólo aparecen exigidos por el mercado sino por la propia autoridad. El titular de la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS), Carlos Pávez, aseveró –recién asumido en su cargo– que uno de sus objetivos es desmutualizar la Bolsa.

Al respecto, Camus, quien es partidario de esa medida, ayer evitó explicitar su opinión y se mostró más como un mediador. La desmutualización de la Bolsa busca separar el rol del directorio del interés de las corredoras, nombrando a integrantes independientes. 

“No quiero tener una postura, sino conducir a lo que sea mejor para la institucionalidad, el mercado de capitales y los accionistas”, afirmó, descartando que sea un tema tabú en el directorio.

Camus agregó que “es un tema que ha sido tratado muchas veces y obviamente que creo que lo tenemos que revaluar, es algo que vamos a considerar, pero tenemos que hacer lo estudios”.

Respecto de la posibilidad de fusionarse con la Bolsa Electrónica, se mostró más reacio. “Son instituciones distintas que operan en forma independiente. No sé si se complementan, podría uno pensar en la complementación, pero diría que son instituciones distintas”, apuntó.

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