Mirados desde lejos, los números del 2011 aparentan ser auspiciosos para el cine chileno. Pero en la práctica el éxito sólo se centró en no más de cuatro cintas nacionales. La aclamada Violeta se llevó la mayor cantidad de entradas cortadas, pese a que la producción nacional durante el año pasado fue amplia. La formación de audiencia audiovisual resulta clave a la hora de poder darle sustento a una «industria» que, lo más probable, nunca lo sea. Además, junto a nuestros invitados, debatimos la relación entre el contexto socio-cultural con la acogida de las cintas nacionales en el público masivo; y, también, cuáles son las fortalezas de séptimo arte nacional (donde destaca la producción documental). Nos acompañan, en esta ocasión, Leopoldo Muñoz, periodista y crítico de cine, y Daniel Olave, crítico, guionista y editor de Todo Cine.
