Medio en broma, medio en serio. Así se tomó Netflix el hecho de no haber ganado un premio Emmy, sobre todo en la categoría de Mejor Drama, donde el caballo de batalla del servicio de series y películas por streaming, House of Cards, era uno de los favoritos.
"Pensé que teníamos un acuerdo" le dice Doug Stamper, asistente del ambicioso Frank Underwood, al director de la academia de televisión Estadounidense, muy al estilo políticamente voraz de la serie.