Decenas de personas se manifestaron en Chicago, en el marco de una acción nacional convocada por activistas de diversos lugares de Estados Unidos, para pedir un enfoque moral a las políticas que afectan a los más desfavorecidos.
Los inmigrantes hispanos tuvieron una presencia destacada en la protesta de Chicago. Con carteles y consignas en español, pidieron salarios más dignos y mejores condiciones de vida para los inmigrantes.
La manifestación se centró en pedir la aprobación del salario mínimo de 15 dólares, poco más de 10 mil pesos chilenos, por hora y en la gestión del gobernador de Illinois, Bruce Rauner, y sus políticas fiscales, que perjudican a los más pobres, a los trabajadores con bajos salarios, a los enfermos y a personas en riesgo de exclusión que viven en este estado según informa la agencia EFE.