El hecho ocurrió en Canadá. La niña estaba alimentando al lobo marino, junto a sus familiares. En eso, decide sentarse en el borde pero no esperaba que el animal la agarrara de la ropa y la arrastrara al agua. De inmediato, un hombre que se desconoce si es un familiar de la pequeña, se arroja sin dudarlo al agua para rescatarla. La niña resultó ilesa.