La mitad de los beneficios del llamado «diamante de la paz» serán usados para mejorar las condiciones de la aldea en la que fue encontrado.
Eso incluye agua potable, electricidad y carreteras para la localidad de Koryardu, en el distrito de Kono.
El diamante –el más grande descubierto en Sierra Leona en 50 años y entre los 14 de más tamaño del mundo- fue hallado por Emmanuel Momoh, un pastor cristiano, quien lo entregó al gobierno.
Momoh no quiso vender la piedra a un intermediario porque «no habría beneficiado a la comunidad”, según le explicó a la BBC.
«Nos faltan muchas cosas. No tenemos buenas carreteras ni agua potable» añadió.