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Roban expedientes de causa que indaga sobre el robo de manos de Perón

En junio de 1987 se descubrió que desconocidos habían ingresado en el cementerio de la Chacarita de Buenos Aires y profanado la tumba del fundador del Partido Justicialista, a cuyo cadáver embalsamado le cortaron las manos.


Un juez que investiga el robo en 1987 de las manos del tres veces presidente argentino Juan Domingo Perón denunció que un «grupo comando» ingresó en su casa y sustrajo los expedientes de los últimos nueve años de investigación del misterioso caso, informa este viernes el diario La Nación.



El juez Alberto Baños hizo una minuciosa descripción de lo que consideró una «operación de inteligencia y de intimidación psicológica», en un oficio que envió en estos días a la Cámara del Crimen de Buenos Aires, apunta el centenario rotativo.



En ese escrito explicó que el robo ocurrió el domingo pasado en su vivienda, a la que había llevado los expedientes porque tenía previsto reiterar un pedido al Gobierno para que dispusiera el levantamiento del secreto en los organismos de inteligencia del Estado con el propósito de que aportaran datos a la causa.



Baños señaló que el ex presidente argentino Néstor Kirchner (2003-2007) no dio respuesta a una petición similar hecha en julio del año pasado.



El juez aclaró que se trató de una «operación de inteligencia» porque los intrusos que ingresaron en su casa «sólo se llevaron los expedientes, un ordenador portátil, una agenda electrónica y un teléfono móvil, y no alhajas ni dinero en efectivo que había en la vivienda», sostiene La Nación.



El episodio estuvo rodeado de otras situaciones sospechosas, como el hecho de que los ladrones tardaron sólo cuatro segundos en desactivar la alarma de la vivienda o un llamado recibido por un cuñado del juez en el que se le preguntaba por un tal «Justinio Valentino».



En su escrito Baños sostuvo que analistas de inteligencia le indicaron que ese nombre es una clara referencia a quien «hace justicia y se hace el valiente».



La causa



En junio de 1987 se descubrió que desconocidos habían ingresado en el cementerio de la Chacarita de Buenos Aires y profanado la tumba del fundador del Partido Justicialista, a cuyo cadáver embalsamado le cortaron las manos.



La causa, que ha pasado por varios juzgados y no tiene detenidos ni imputados, ha estado siempre rodeada de circunstancias misteriosas.



El primer juez del caso, Far Suau, murió en 1988 en un accidente automovilístico cuyas causas nunca quedaron claras y en 1994, cuatro años después de que el expediente fuese archivado, Baños reabrió la investigación tras el hallazgo en una comisaría de uno de los cuatro juegos de llaves que abren el vidrio que protege al féretro.



En octubre de 2006 los restos de Perón (1895-1974) fueron trasladados desde el cementerio de la Chacarita hacia un mausoleo en una finca a las afueras de Buenos Aires que perteneció al ex presidente.



EFE

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