La dirección de la Policía Judicial en Lisboa censuró sus afirmaciones y lo apartó del caso poco después que anunciara su jubilación anticipada de la institución en la que había prestado servicio durante 27 años.
Goní§alo Amaral, ex detective jefe del caso Madeleine que fue ridiculizado por la prensa británica y tuvo que jubilarse con 48 años, aún no ha dicho su última palabra sobre la desaparición de la niña.
Principal defensor de la culpabilidad de los padres de Madeleine, Kate y Gerry McCann, Amaral anunció la semana pasada que este jueves saldría a la luz su esperado libro sobre un caso que le costó la carrera en la Policía Judicial y que ha sido hoy archivado por la Fiscalía.
Aunque el secreto del sumario, aún no levantado formalmente, le exponen a posibles sanciones legales por su vinculación profesional a la investigación, los representantes del ex policía aseguran que dará una rueda de prensa en Lisboa para comentar su obra y firmar ejemplares.
En 216 páginas y 8 hojas de anexos «Maddie, la verdad de la mentira», cuyo contenido aún nadie conoce, promete desvelar las incógnitas de un caso que dio la vuelta al mundo durante 14 meses de investigación a los que hoy se dio carpetazo por falta de pruebas.
Amaral en sus escasas declaraciones a la prensa portuguesa había adelantado su convencimiento de que éste iba a ser el destino del caso desde el momento en que fue apartado de él, pese a que considera que sí hay indicios relevantes para abrir una causa.
EFE
