La reunión del grupo de trabajo sobre asuntos migratorios y consulares comenzará el miércoles en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba y durará dos días.
Delegaciones de Cuba y México se reunirán a partir de este miércoles en La Habana para tratar de encontrar soluciones a varios problemas migratorios, incluida la espinosa cuestión de la devolución de cubanos que ingresan ilegalmente en ese país.
El embajador mexicano en Cuba, Gabriel Jiménez Remus, informó a periodistas extranjeros que el tema de la repatriación de cubanos es un asunto de «alta sensibilidad» para La Habana, aunque aseguró que ambos Gobiernos están «muy cerca» de llegar a un acuerdo.
«Estamos muy cerca, porque el canciller (cubano, Felipe) Pérez Roque tiene previsto su viaje a México el 11 y 12 de septiembre próximo y el ideal de ambos Gobiernos» es que en esta visita se firmen todos los acuerdos, explicó Jiménez Remus.
«Estamos optimistas de que se arregle esto en la visita de Pérez Roque a México, que llevará la invitación personal del presidente Raúl Castro» para que el jefe de Estado mexicano, Felipe Calderón, visite Cuba, agregó el embajador.
La reunión del grupo de trabajo sobre asuntos migratorios y consulares comenzará el miércoles en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba y durará dos días.
Las delegaciones estarán encabezadas por el vicecanciller cubano, Alejandro González, y los mexicanos Jerónimo Gutiérrez, subsecretario para América Latina y el Caribe, y Cecilia Romero, comisionada del Instituto Nacional de Migración.
La agenda de temas incluye el combate al tráfico de migrantes y trata de personas y delitos conexos; documentación migratoria y medidas de facilitación; revisión de los actuales procesos de devolución de cubanos y el estudio de convenios y programas para facilitar el ingreso a los ciudadanos de los dos países.
El embajador reconoció que «hay temas que no resultan fáciles o cuando menos tienen una mayor complicación en esta agenda bilateral migratoria», en alusión a la devolución de cubanos que ingresan a México por tierra, principalmente a través de la frontera de Guatemala y Belice.
Según datos de las autoridades mexicanas, anualmente 10.000 cubanos ingresan anualmente a ese país, aunque el embajador no descartó que el número sea mayor.
«Hasta el momento, la práctica cubana es no admitir la devolución de los cubanos que entran por tierra, sobre todo los que entran por la frontera sur de México, llámese Guatemala o Belice, solo acepta la devolución de los cubanos capturados en el mar», explicó.
«Se están buscando mecanismos o procedimientos tomando en consideración la alta sensibilidad que representa este tema para los cubanos, pero también buscando la comprensión de los cubanos por el problema que significa para México este desorden en esta emigración ilegal», agregó.
Jiménez Remus afirmó que el Gobierno de su país está dispuesto a facilitar los flujos de nacionales cubanos «mediante la mejora de procedimientos migratorios y la adecuación de los requisitos tomando en cuenta la realidad socioeconómica de Cuba».
Esta alternativa permitiría reducir la importancia que México otorga a aspectos como la solvencia financiera del solicitante en Cuba, lo cual traba casos de peticiones legales.
México otorga mensualmente entre 1.500 y 2.000 visas mensuales a cubanos, aunque, según el embajador, no hay cálculos sobre a cuánto ascendería ese número en caso de facilitar la expedición de visados.
La inmensa mayoría de los cubanos que va a México lo hace para cruzar a EE.UU., país en el que una vez ingresan adquieren automáticamente el derecho de residencia.
México es, además, un punto intermedio para las mafias dedicadas al tráfico de cubanos que tratan de llegar a territorio estadounidense por mar.
EFE
