Los italianos, entre ellos quince menores, procedían de la ciudad armenia de Gymni, a la que ayer fueron traslados en autobús desde Tiflis para emprender hoy viaje hacia Italia.
Un grupo de 110 italianos y otros 20 ciudadanos de la Unión Europea, evacuados de Georgia debido al conflicto en la región separatista de Osetia del Sur, llegaron hoy al aeropuerto romano de Ciampino en dos aviones de la Aeronáutica militar.
Al grupo se unieron también una veintena de ciudadanos de la Unión Europea, entre ellos holandeses y portugueses.
Los italianos evacuados contaron a medios locales a su llegada a Roma que «en los alrededores del Tiflis la situación es terrible, hay muertos, heridos, pueblos destruidos. Los bombardeos continúan».
Una mujer que estaba en Tiflis de turismo, Giovanna Datti, indicó: «La ciudad está en silencio, hay una gran tristeza, he visto delante de la sede del Parlamento a gente que lloraba».
Otra mujer, georgiana con doble nacionalidad que estaba en Tiflis también de vacaciones, dijo que estaba en el centro de la capital y no ha visto los bombardeos, pero, añadió: «Obviamente los he escuchado, durante algunas noches no hemos dormido esperando los ataques».
El jefe de la Unidad de Crisis del Ministerio italiano de Asuntos Exteriores, Fabrizio Romano, presente en el aeropuerto, explicó que en Tiflis quedan entre 60 y 70 italianos, que residen de manera estable allí, en su mayoría religiosos y empresarios.
Romano indicó que la repatriación de los italianos ha sido «un éxodo voluntario», una «operación muy rápida».
Entre los evacuados hay un equipo de paleontología de la Universidad de Florencia (centro), que desde hace años trabajaba en un proyecto internacional en unas excavaciones en Damanisi, cerca de Tiflis.
EFE
