La remuneración del jefe de Estado paraguayo totaliza 15.980.000 guaraníes (unos 4.000 dólares), incluido el salario y los gastos de representación, y es cinco veces menor de lo que percibe el director de la hidroeléctrica de Itaipú, que este país comparte con Brasil, según datos oficiales.
El ex obispo paraguayo Fernando Lugo prometió este jueves, en la víspera de la toma de posesión como jefe del Estado, que renunciará a su sueldo como presidente de la República.
Ante varios miles de asistentes al acto «América Latina unida y sin fronteras», realizado en un polideportivo de Asunción, Lugo afirmó a sus seguidores que renunciará a su «sueldo de presidente» y agregó que no le «hará falta ese dinero que pertenece a los más humildes».
La remuneración del jefe de Estado paraguayo totaliza 15.980.000 guaraníes (unos 4.000 dólares), incluido el salario y los gastos de representación, y es cinco veces menor de lo que percibe el director de la hidroeléctrica de Itaipú, que este país comparte con Brasil, según datos oficiales.
«Mañana será otro día, mañana será otra historia», afirmó el ex obispo que agregó que en la pasadas elecciones de abril «este pueblo marcó la diferencia y este pueblo cambió la historia del país y eso no siempre se hace».
En su intervención, el próximo presidente paraguayo dijo que «los ojos de América Latina, los ojos del mundo miran a nuestro país, nos miran porque somos diferentes».
En el acto participaron varios dirigentes latinoamericanos de izquierdas, aunque no contó con la presencia de los presidentes de la región que estaban invitados.
La organización había adelantado que podrían intervenir los gobernantes de Bolivia, Evo Morales; de Ecuador, Rafael Correa; y de Venezuela, Hugo Chávez.
Morales y Correa llegaron a Asunción a la hora en que empezaba el acto, mientras a Chávez se le espera hacia la medianoche del jueves.
EFE
