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Orden y lentitud en evacuación del sur Luisiana por huracán «Gustav»

Tanto en Nueva Orleans como en los municipios de los alrededores al sur y al oeste aumentó hoy la presencia de unidades de la Guardia Nacional, la policía municipal y la policía del Estado, y una de sus tareas es instar a los vecinos remolones a que se vayan.


La masiva evacuación de alrededor de un millón de habitantes del sur de Luisiana se lleva a cabo con lentitud y orden a la espera del impacto el lunes del extremadamente peligroso huracán «Gustav».



Por las autopistas se mueven lentamente miles de vehículos y nadie puede regresar a Nueva Orleans y los municipios del sur de Luisiana, afectados por la evacuación.



La presencia de policías y soldados de la Guardia Nacional es ostensible para mantener un orden y mostrar además que se será implacable con quienes se escondan para cometer actos de pillaje.



El alcalde de Nueva Orleans, Ray Nagin, volvió a insistir hoy en una emisora local de radio que «no habrá la menor tolerancia para los saqueadores, y cualquier persona detenida que esté saqueando irá directamente a la cárcel».



La Agencia de Emergencias de Luisiana informó de que el tráfico que se aleja de Nueva Orleans y el Delta del Misisipi se mueve a una velocidad promedio de unos 15 kilómetros por hora en las rutas 90, hacia el oeste y Texas, y la ruta 10 hacia el este y Misisipi.



El movimiento era un poco más fluido en la ruta 55 que conduce hacia el norte y Jackson (Misisipi) donde, al igual que en las otras autopistas hoy se impide el tránsito hacia el sur y se han habilitado ambos lados de las rutas para los cientos de miles de vehículos que se alejan del ciclón.



Según el Centro Nacional de Huracanes (CNH), con sede en Miami, el Gustav» impactará el lunes en la costa de Luisiana como un huracán de fortísima intensidad, posiblemente como categoría cuatro con cientos cercanos a los 240 kilómetros por hora.



Nagin indicó que unas 16.000 personas se registraron en la ciudad para ser trasladadas en los cientos de autobuses del transporte público movilizados para alejar de Nueva Orleans a los residentes que no tienen medios propios de transporte.



«Aunque quisiéramos que todos los residentes abandonaran la ciudad, hay algunos que no quieren irse», explicó el alcalde. «Pero yo me siento satisfecho con el ritmo y el volumen de la evacuación en marcha» y que comenzó el sábado por la mañana.



Tanto en Nueva Orleans como en los municipios de los alrededores al sur y al oeste aumentó hoy la presencia de unidades de la Guardia Nacional, la policía municipal y la policía del Estado, y una de sus tareas es instar a los vecinos remolones a que se vayan.



En la ciudad y los barrios se aplicará desde el anochecer un toque de queda que se extenderá hasta el amanecer.



El día continúa soleado y con temperaturas de más de 32 grados Celsius, pero hacia el sur empiezan a verse las primeras nubes altas que forman el exterior del huracán «Gustav».



EFE

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