Pese al discurso oficial, algunos ministros brasileños admitieron que el acceso al crédito para exportaciones y para el consumo interno se ha visto afectado por la crisis internacional, lo que obligó al Gobierno ha tomar medidas para que no falte dinero en el mercado.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, aseguró este domingo que el país no puede «vacilar» ante la crisis financiera internacional aunque esté preparado para enfrentarla y subrayó que no habrá cambios en los programas de inversión de su Gobierno.
«No habrá ninguna mudanza en las obras del PAC (Programa de Aceleración del Crecimiento), en las obras de infraestructura, en las obras de Petrobras, en las principales refinerías, en las obras de habitación, nada será cambiado», dijo Lula después de votar en las elecciones municipales.
Lula, que ha minimizado el impacto de la crisis financiera en Brasil, señaló que hasta la licitación para construir un tren bala entre Sao Paulo y Río de Janeiro se hará en marzo del año próximo, como está previsto, «para demostrar que sabemos lidiar con la crisis».
«Hicimos la lección de casa cuando era necesario y ahora tenemos reservas (de unos 200.000 millones de dólares) para enfrentar esa y otras crisis», manifestó a periodistas en Sao Bernardo do Campo, municipio vecino a Sao Paulo, donde votó por alcalde y concejal.
Pese al discurso oficial, algunos ministros brasileños admitieron que el acceso al crédito para exportaciones y para el consumo interno se ha visto afectado por la crisis internacional, lo que obligó al Gobierno ha tomar medidas para que no falte dinero en el mercado.
De otro lado, la ministra jefe de la Casa Civil (Presidencia), Dilma Rousseff, dijo hoy en la sureña ciudad de Porto Alegre que Brasil sentirá las turbulencias de la crisis, pero coincidió con Lula en que las inversiones en infraestructura no serán afectadas.
«No hay dudas en cuanto a los recursos del PAC», dijo la ministra, según la oficial Agencia Brasil.
Rousseff agregó que la liquidez del sector privado tampoco se verá comprometida, pues Brasil tiene condiciones para asegurar el crédito interno.
«Vamos a tener algunos problemas momentáneos pero tenemos robustez suficiente para superar esa inmensa fase de contagio» de la crisis, expresó.
EFE
