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Estados Unidos le quita el piso a Mubarak y presiona por salida controlada de la crisis

El mandatario norteamericano dejó de manifiesto el interés de Washington por que se mantenga bajo control la situación en un país que considera clave para sus intereses en la región, considerando su posición no beligerante con Israel. También destacó que el propio presidente egipcio reconoció que «el status quo no es sostenible y que es necesario un cambio».


El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pidió el martes último que el proceso de transición en Egipto comience «ahora» y aseguró que su homólogo egipcio, Hosni Mubarak, reconoció la necesidad de un cambio en el país.

Mubarak «reconoce que el status quo no es sostenible y que es necesario un cambio», afirmó Obama en unas breves declaraciones televisadas desde la Casa Blanca, dejando claro el interés de su administración por que se mantenga bajo control ese país, clave para sus intereses en la región, entre aspectos, por su posición no beligerante con Israel que contrasta con la política de otras naciones árabes.

Horas antes, el presidente estadounidense había conversado por cerca de media hora con Mubarak.

Las declaraciones de Obama llegan después de que Mubarak anunciara el martes, en un mensaje televisado a la nación que no se presentará a las próximas elecciones presidenciales programadas para septiembre de este año.

«Les digo con toda sinceridad que, al margen de las actuales circunstancias, no tenía intención de participar en las próximas elecciones», afirmó Mubarak en su discurso, que pronunció hacia las 23.00 hora local (21.00 GMT).

«Transición ordenada»

«Lo que está claro, y lo que le indiqué esta noche al presidente Mubarak es mi convicción en que una transición ordenada (…) debe ser pacífica y debe comenzar ahora», subrayó Obama.

Añadió que el proceso debe incluir a «un amplio espectro» de voces egipcias de los partidos de oposición y debería conducir a elecciones «libres y justas».

Obama aseguró que EE.UU. seguirá ayudando a Egipto, un país al que describió como aliado y amigo.

«Estamos listos para ofrecer la ayuda que sea necesaria para ayudar al pueblo egipto a afrontar las repercusiones de estas protestas», afirmó el presidente.

Hizo hincapié, por lo demás, en que «no es el papel de ningún otro país» el determinar quienes serán los futuros líderes de Egipto. «Sólo el pueblo egipcio puede hacer eso», destacó.

Obama vio el discurso de Mubarak en la Sala de Crisis de la Casa Blanca acompañado de sus asesores de seguridad nacional.

Se calcula que al menos un millón de personas participaron el martes en manifestaciones en Egipto para pedir el fin del Gobierno de Mubarak, que ha liderado el país durante las últimas tres décadas.

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