A última hora se evitó que una huelga cerrara la industria petrolera en Noruega, uno de los países más ricos del mundo. ¿Qué exigen unos trabajadores que ganan en promedio US$160.000 al año?.
Noruega es uno de los países en donde mejor se vive de todo el mundo. Educación, salud y condiciones laborales envidiables, y unos salarios muchos más altos que la media europea.
Y sin embargo su industria más importante, la petrolera, estuvo al borde de paralizarse esta semana por una huelga.
Tras un cuarto de siglo de extracción petrolera, Noruega se ha convertido en el octavo productor del mundo, una bonanza de la que todo noruego de a pie puede decir que se ha beneficiado.
Sin embargo, los trabajadores de las plataformas petroleras pasaron las últimas tres semanas protestando y las compañías se habrían visto forzadas a cerrar la producción, si no se hubiera producido una intervención gubernamental de última hora.
A tan sólo minutos de que se produjera el corte de la producción, la media noche del lunes el Ministerio del Trabajo ordenó la reanudación de faena, en lo que la Asociación de la Industria Petrolera noruega (OLF) describió como una «elección responsable».
Pero el descontento laboral continua y también la pregunta: ¿De qué se quejan unos trabajadores que cuentan con los salarios más altos de la industria en el mundo y una media de 16 semanas de trabajo al año?.
Los trabajadores de las plataformas noruegas trabajan una media de 16 semanas al año.
Muchos noruegos consideran que los 7.000 trabajadores que estaban en huelga gozan de una posición privilegiada, aunque reconocen que soportan duras condiciones laborales.
«Los trabajadores de las plataformas petroleras tienen unos ingresos anuales de más de US$ 160.000 y se retiran a la edad de 65 años, lo que los convierte en los reyes de las pensiones en el país. Aun así han decidido usar sus poderes para conseguir mejores condiciones», aseguró Jan Hodneland, negociador de la OLF.
Pero los tres sindicatos más importantes del país demandaban el derecho de los petroleros a jubilarse a los 62 años con el total de la pensión, algo que según Industri Energi, el más grande de los tres grupos laborales, la patronal intenta eliminar.
De acuerdo con los expertos Noruega quiere mantener su imagen de fiable proveedor de petróleo, aunque el gobierno tuvo reservas frente a una posible intervención ya que las sindicatos son importantes aliados para las elecciones del próximo año.
El último paro en la industria del país escandinavo ocurrió en 1986 y duró tres semanas hasta que se produjo la intervención.
En 2004 el gobierno también intervino para impedir un cierre de la actividad.
La producción se ha visto reducida en un 13% desde que comenzó la huelga, según la OLF.
