Los yihadistas han colocado explosivos en todos los caminos y accesos que conducen a la ciudad, además de en edificios gubernamentales y viviendas. También han estacionado varios coches bomba en distintas avenidas, lo que dificulta el avance de las fuerzas.
Las tropas iraquíes iniciaron este martes sus operaciones para recuperar el control de la ciudad de Tikrit (norte) y expulsar de ella al grupo yihadista Estado Islámico (EI), informó a Efe una fuente de seguridad iraquí.
La ciudad, en manos de los extremistas desde junio pasado, es el principal blanco de la ofensiva lanzada por las autoridades iraquíes a principios de mes en el norte de la estratégica provincia de Saladino, cuya capital es Tikrit.
Participan en la campaña fuerzas del Ejército, la Policía y de la Jefatura de Operaciones de Saladino, así como milicianos chiíes y tribales, que efectúan sus ataques desde tres puntos de la ciudad.
La fuente precisó que las tropas comenzaron a entrar en Tikrit desde las zonas de Shishin, en el sur; Al Diyum, en el oeste; y el barrio de Al Qadesiya, en el norte.
La ofensiva cuenta con el apoyo de la aviación iraquí, mientras que otras fuerzas de seguridad están desplegadas en el este para impedir la huida de los combatientes del EI.
Los yihadistas han colocado explosivos en todos los caminos y accesos que conducen a Tikrit, además de en edificios gubernamentales y viviendas, según la fuente consultada por Efe.
También han estacionado varios coches bomba en las avenidas de la ciudad, lo que dificulta el avance de las fuerzas iraquíes.
Las tropas regulares empezaron esta campaña contra Tikrit después de liberar ayer la cercana localidad de Al Alam, tras intensos combates con los yihadistas.
Además de Al Alam, situada a 15 kilómetros al este de Tikrit, el Ejército retomó también ayer el control de las poblaciones de Albuhiazaa, Al Debsa y Al Ali.
El control de la provincia de Saladino es clave para estrechar el cerco a los yihadistas en Mosul, la segunda ciudad de Irak y principal feudo de los radicales.
Ayer, el jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, el general Martin Dempsey, mostró en Bagdad su respaldo a la guerra contra el EI y precisó es una batalla de Irak en la que su país solo presta apoyo, en alusión a la coalición internacional liderada por Washington que bombardea las posiciones de los yihadistas.
