El atacante fue descrito como una persona «muy dulce» que no mostró nunca un lado violento, pero sí estaba furioso porque después de tener un encuentro con un latino, este le confesó que estaba contagiado de VIH.
En entrevista con la cadena Univisión, un hombre que se presentó como «Miguel» y apareció disfrazado ante las cámaras, dijo que la matanza perpetrada por Omar Mateen en el club Pulse de la ciudad de Orlando en Estados Unidos no era de un terrorista islámico sino de alguien que actuó por venganza contra los gays de la comunidad latina.
El hombre, quien mantuvo una relación de «amigos con beneficios» con Mateen, dijo que el autor del ataque que dejó 50 muertos y decenas de heridos, sentía rencor por los latinos y estaba furioso porque «se sentía usados por ellos» después de mantener un encuentro con un hombre que luego le confesó estar contagiado con VIH.
«Mi reacción fue no poder creer que el hombre al que yo conocí pudo haber hecho algo así», dijo «Miguel», quien estuvo con Omar Mateen poco más de dos meses. «He llorado mucho. Pero lo que me hizo contar la verdad es que él no lo hizo por terrorismo. En mi opinión fue por venganza», afirmó el individuo a Univisión.
Mateen casado y padre de un hijo conoció a este hombre en un sitio de citas y lo describió como alguien «muy dulce, que le gustaba ser acurrucado» y que jamás mostró un lado violento.
Solamente en una ocasión, según su testimonio, criticó la guerra contra el terrorismo de Estados Unidos, espcialmente «la muerte de mujeres y niños inocentes, sobre lo cual encontré que tenía razón», afirmó «Miguel».
