El atacante fue identificado como un policía turco de 22 años
El atentado ocurre justo cuando el trato entre los gobiernos de Putin y Erdogan comenzaba a descongelarse, después de que el país islámico derribara un avión ruso en 2015. Como prueba de ello estaba la exposición en la que participaba el diplomático y la decisión de apoyar en conjunto una operación humanitaria en Alepo para el repliegue de los insurgentes de la ciudad siria.
En la víspera de una reunión en Moscú de los ministros de Relaciones Exteriores, de Rusia,Turquía e Irán para abordar la situación de crisis generada por los bombardeos en la ciudad siria de Aleppo, un atacante solitario, mató al embajador ruso en Turquía Andrei Karlov, luego de dispararle mientras presentaba una exposición de fotografía en Ankara, la capital turca.
El atacante identificado como Mevlüt Mert Altintas, se graduó de la escuela de policía de Esmirna (oeste del país) en 2014, agregó el diario Yeni Safak, cercano al Gobierno islamista de Turquía.»¡No se olviden de Alepo, no se olviden de Siria. A menos que nosotros estemos todos seguros, ustedes tampoco sentirán seguridad. ¡Vuelvan, vuelvan! Todos aquellos que compartan esta opresión y tortura pagarán por ello», exclamó. Minutos después, el pistolero, fue abatido por las fuerzas de seguridad turcas. Andrei Karlov en tanto murió mientras era atendido en un hospital cercano.
Se presume que el sospechoso, pertenecía a un grupo islámico radical, ligado a los rebeldes contra el gobierno de Bashar Al Assad, enfrentados al ejército regular, por el control de la ciudad.
En los últimos días, en medio de un despliegue muy confuso de noticias, se ha informado que las tropas leales a Al Assad tienen el control de la ciudad, obligando a los terroristas a replegarse.
En ese contexto, se puede entender el atentado ocurrido este lunes, cuando el hombre entró vestido como un guardia de seguridad a la galería y disparó siete tiros contra el cuerpo del embajador. Pero también enturbia las relaciones entre Rusia y Turquía que se mantenían en la práctica congeladas desde que Turquía derribara un avión de combate ruso en 2015.
De hecho, como muestra de cooperación ambos países habían acordado la semana pasada, apoyar una tregua en Siria, para permitir la salida de los heridos, los enfermos y los insurgentes desde Alepo una vez que la ciudad quedara en manos del Ejército.
La comunidad internacional a través de Naciones Unidas condenó hoy el ataque.»Está claro que condenamos el ataque contra el embajador ruso en Turquía. No puede haber justificación a un ataque contra un diplomático», dijo Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Dujarric atendió a los periodistas momentos antes de que el Ministerio de Exteriores ruso confirmara la muerte de Karlov, y cuando sólo se sabía que estaba hospitalizado.
