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El Gobierno teme la presencia de armas en las protestas convocadas para este sábado. Los servicios secretos creen que los «chalecos amarillos» podrían ser usados con la intención de «derrocar el poder».
El ministro del Interior, Christophe Castaner, justificó este viernes (07.12.2018) los temores al explicar, en conferencia de prensa, que en las investigaciones tras los altercados del pasado sábado «se han descubierto armas».
A modo de ejemplo, dijo que este jueves se detuvo a una persona, de la que no quiso dar su identidad, que había amenazado a las fuerzas del orden en las redes sociales y dicho que quería «matar la República». En el domicilio del individuo se encontraron dos pistolas, además de material para participar en manifestaciones.
También contó que el pasado sábado un grupo de manifestantes en París robó un fusil a un policía que trataba de escapar del incendio de su furgón y le dio una paliza.
En esa línea, el portavoz del Gobierno, Benjamin Griveaux señaló en una entrevista publicada este viernes por Le Parisien que los servicios secretos sospechan que en las manifestaciones podría haber elementos «politizados y radicalizados» que tratan de instrumentalizar a los «chalecos amarillos» con la intención de «derrocar el poder».
Casi 90.000 agentes serán desplegados
El primer ministro francés, Édouard Philippe, anunció este jueves «una movilización excepcional» de 89.000 agentes de las fuerzas del orden ante las protestas, de los cuales 8.000 estarán apostados en París.
La Prefectura de Policía de París ha recomendado a los comerciantes de la zona de los Campos Elíseos, que incluye tanto esa avenida como las calles adyacentes, que cierren sus puertas y accesos.
Asimismo, ha instado a quitar de los lugares sensibles material de obras u otros elementos que podrían servir como proyectiles.
El aviso insta además a proteger los establecimientos de eventuales daños con paneles en los escaparates y a replegar terrazas y todo objeto vulnerable.
Monumentos serán cerrados por seguridad
Los principales monumentos de París, una de las ciudades con mayor número de turistas del mundo, cerrarán como medida de seguridad.
El jueves se anunció que la torre Eiffel, la Ópera de París y el Grand Palais iban a impedir el acceso a visitantes. Este viernes, el Centro de Monumentos Nacionales (CMN) informó que lugares tan emblemáticos como el Arco del Triunfo o las torres de la catedral de Notre Dame harán lo mismo.
En un escueto comunicado, el CMN señaló que siete de los sitios que gestiona en la capital cerrarán sus puertas. Entre los monumentos incluidos en esta medida están, además de los mencionados, el Panteón, la Sainte Chapelle y el Palacio Real.
