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Hidroeléctricas: más perjuicios que beneficios para Aysén

Patricio Walker
Por : Patricio Walker Presidente del Senado
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Soy partidario de un royalty que se pague permanente y no sólo por 15 años a las zonas afectadas. Al no existir un pronunciamiento por parte del gobierno en relación a estas propuestas, estimo que no podemos permitir que se construyan las centrales hidroeléctricas si no se genera una compensación económica.


Este año va a ser decisivo para el futuro de los proyectos de mega centrales hidroeléctricas en la Región de Aysén. Sin perjuicio que la decisión recaerá en la Comisión de Evaluación Ambiental (ex COREMA) y, eventualmente en el Consejo de Ministros, como Senador por la Región me veo en la obligación de manifestar una vez más mis aprensiones respecto de una eventual aprobación pura y simple de dichos proyectos. Algunas de las razones son las siguientes:

1.-Externalidades negativas que afectan las estrategias de desarrollo de Aysén, especialmente en el ámbito turístico.

El turismo de intereses especiales, el ecoturismo y el turismo aventura tienen un tremendo potencial de desarrollo en una región que por su naturaleza única puede generar ingresos económicos importantes similares a países como Nueva Zelanda, en la medida que las actividades económicas se desarrollen en armonía con la belleza escénica de esta maravillosa parte de nuestra Patagonia.

[cita]Soy partidario de un royalty que se pague permanente y no sólo por 15 años a las zonas afectadas. Al no existir un pronunciamiento por parte del gobierno en relación a estas propuestas, estimo que no podemos permitir  que se construyan las centrales hidroeléctricas si no se genera una compensación económica.[/cita]

La multigremial de Aysén, luego de un trabajo arduo y serio que ha realizado durante todo el 2010 con la participación de diversos actores de la región, incluidos  los parlamentarios,  ha señalado que las líneas de transmisión que se proyecta construir para suministrar energía eléctrica al  sistema de interconectado central, en caso de aprobarse la construcción de las mega centrales hidroeléctricas, no debe afectar predios productivos ni ser visibles desde la carretera austral.

En la actualidad, con los antecedentes que disponemos y al no evaluarse simultáneamente los proyectos de generación, de distribución y transmisión de energía eléctrica, no es posible conocer el impacto real y las consecuentes externalidades negativas que generarán estos proyectos en la región, especialmente en el ámbito turístico.

2.-Falta de compensaciones suficientes para hacerse cargo de los perjuicios ocasionados.

Tal como lo señaló la multigremial “para que los proyectos hidroeléctricos sean compatibles con el desarrollo regional deben otorgarse ciertas garantías para mitigar los daños ocasionados”.

Para cumplir este objetivo, cualquier proyecto hidroeléctrico debería considerar los siguientes aspectos:

2.1-Royalty al agua:

Así como la región de Magallanes ha puesto en valor sus recursos naturales y destina un 5% de las ventas de hidrocarburo (gas y petróleo) destinando esos recursos a un fondo de desarrollo de Magallanes (FONDEMA), nuestra región de Aysén no puede aceptar que se instalen centrales hidroeléctricas sin una compensación suficiente que permita financiar proyectos de emprendimiento regional y local. Por estos motivos, la multigremial propuso al gobierno el envío de un proyecto de ley para que todos los proyectos hidroeléctricos que generen más de 200 MW, destinen un 5% de lo generado con el agua de la región  al desarrollo de las comunas y la región donde se instalan estas empresas.

Hasta el momento el gobierno no se ha pronunciado sobre esta propuesta. Podemos señalar que en el gobierno de la Presidenta Bachelet se presentó un proyecto de ley en noviembre de 2009, el cual pretendió crear un mecanismo de compensación para las zonas afectadas. Este proyecto establecía que las empresas que generaran una cantidad igual o superior a 200MW deberán pagar un impuesto específico de beneficio municipal de 270 UTM  por cada MW de potencia de placa que tenga cada unidad de generación. Este impuesto específico se pagaría en 10 o 15 cuotas anuales.

Personalmente estimo que este proyecto de ley es insuficiente y, por eso, soy partidario de un royalty que se pague permanente y no sólo por 15 años a las zonas afectadas. Al no existir un pronunciamiento por parte del gobierno en relación a estas propuestas, estimo que no podemos permitir  que se construyan las centrales hidroeléctricas si no se genera una compensación económica a través de un royalty a favor de la región.

2.2-Energía barata para la región.

Para hacer efectivo el compromiso de las empresas de entregar energía barata a la población de Aysén que se traduzca en una rebaja en las tarifas de los usuarios, debería señalarse el mecanismo legal  a través del cual se va a hacer efectiva esta eventual rebaja. Algunos expertos en la materia sostienen  que debe modificarse el actual marco regulatorio para cumplir con dicho objetivo en una región donde la generación, distribución y transmisión están en las mismas manos. Hasta el día de hoy no conocemos ninguna fórmula concreta por parte del gobierno que permita rebajar las “cuentas de luz” a los aiseninos.

Por otra parte, y  con la intención de generar una opción democrática e involucrar a la comunidad en la toma de decisiones a través de un plebiscito,  presenté, en septiembre de 2009, un proyecto de ley  para modificar el artículo 99 de la Ley Orgánica Constitucional de Municipalidades, que regula la convocatoria a plebiscitos comunales.

Esta iniciativa apunta a que las ayseninas y ayseninos puedan decidir  el futuro de nuestra región, especialmente en el tema de las centrales Hidroeléctricas. A pesar que he solicitado reiteradamente al gobierno el patrocinio a este proyecto (de otra forma no puede tramitarse toda vez que incide en materias que son iniciativa exclusiva del presidente de la República), hasta la fecha no ha habido respuesta.

Por estas  razones, y en la convicción de estar defendiendo el futuro y los intereses de la región que  tengo el honor de representar en el Senado, manifiesto mi postura contraria a la aprobación de los proyectos de las mega centrales hidroeléctricas para la región de Aysén.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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