De las medidas anunciadas por el Sr. ministro de Salud hay algunas que implican un mayor conocimiento o “cultura en salud” por parte de los pacientes, la que aún en Chile es escasa en la mayoría de las personas.
Respecto a la extensión del postnatal y a las restricciones a imponer para las licencias por reflujo gastroesofágico en los lactantes, es sabido que el reflujo es una condición fisiológica, normal, que en la inmensa mayoría de los niños no produce problemas ni complicaciones y cede simplemente con la edad, por lo que no se requiere exámenes ni tratamientos ni menos someter al niño a irradiación. Las madres deben instruirse y consultar respecto a los riesgos de los exámenes a que someten a sus hijos, como es el estudio radiológico del reflujo.
Las consecuencias de la radiación a tan temprana edad son invisibles (irradia 10 veces más que una radiografía), si el niño tiene oncogenes (predisposición genética a presentar cáncer) la radiación acelerará el desarrollo de esta patología. Además, el riesgo puede incluso traspasarse a la descendencia del niño. Por esto, es injusto para el niño y no es ético ni legal, solicitar un estudio radiológico en un niño sano.
Confiamos en que la prórroga de la licencia postnatal a seis meses de edad contribuya a reducir el número de niños que son sometidos a radiación sin siquiera sospechar al grave peligro al que son expuestos.
Dra. Soledad Tagle
Pediatra-Académica UDP
