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Transparencia: más que un eslogan

Transparencia: más que un eslogan

Pablo Jaeger
Por : Pablo Jaeger Abogado y profesor de derecho de aguas. Accionista minoritario de El Mostrador
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Uno de los tantos mecanismos que ejemplifica lo anterior, es que las sesiones de los concejos municipales deben ser televisadas y transmitidas en directo para que exista libre acceso a la gestión de todas las autoridades locales. Cuando tú sabes que vas a ser sometido a escrutinio, vas a tomar mejores decisiones que si sabes que nadie te va a fiscalizar.


Hemos sido testigos de un empoderamiento ciudadano en su rol de consumidor, ahora es el turno de apropiarse de la transparencia para que los ciudadanos fortalezcan desde el acceso y uso de la información su rol fiscalizador. Esta nueva ciudadanía será la llamada a liderar una nueva forma de participación y serán claves en el fortalecimiento de nuestra democracia.

Ahora que estamos inmersos en el vértigo de las elecciones municipales, debemos ser claros en que la transparencia más que un slogan de campaña debe ser una forma de entender cómo debe funcionar la democracia. En una época donde la política está tan desprestigiada, hace bien que la gente tenga la apreciación de que los recursos públicos, que son recursos de todos nosotros, sean bien invertidos, saber qué hacen los funcionarios públicos con los recursos que tienen a su cargo.

Hemos realizado avances importantes en materia de transparencia, pero sigue existiendo la sospecha en la ciudadanía que algunos contratos de personas o bienes y servicios son poco transparentes y poco competitivos. Por eso, debemos continuar en la senda de profundizar los índices de transparencia, porque ésta va a tener cada vez más importancia, entrar en su dinámica significa un camino sin retorno que solamente suma hechos positivos en favor de nuestra democracia.

Uno de los tantos mecanismos que ejemplifica lo anterior, es que las sesiones de los concejos municipales deben ser televisadas y transmitidas en directo para que exista libre acceso a la gestión de todas las autoridades locales. Cuando tú sabes que vas a ser sometido a escrutinio, vas a tomar mejores decisiones que si sabes que nadie te va a fiscalizar.

También la transparencia ayuda para que los funcionarios públicos sean debidamente evaluados, y esto es de primera importancia que lo recuerden los ciudadanos cuando son convocados como electores. Los funcionarios públicos y en especial los elegidos por la ciudadanía deben rendir cuenta pública de lo que hacen o dejan de hacer.

Uno de los tantos mecanismos que ejemplifica lo anterior, es que las sesiones de los concejos municipales deben ser televisadas y transmitidas en directo para que exista libre acceso a la gestión de todas las autoridades locales. Cuando tú sabes que vas a ser sometido a escrutinio, vas a tomar mejores decisiones que si sabes que nadie te va a fiscalizar.

Si los que son elegidos tienen que dar cuenta de su gestión con absoluta transparencia, y bajo el escrutinio público, es una gestión más abierta y transparente. Esto debiera ser un proceso continuo, al votar por un representante esperas que este representante dé cuentas de lo que hace y las razones de su actuar, y a la vuelta de una nueva elección deberían dar cuenta de lo que hicieron.

La transparencia ayuda a que haya mayor participación, pero no la reemplaza, hay que fomentar ambas con miras a aumentar la influencia de los ciudadanos ante las autoridades que los representan. En este caso la transparencia es un recurso clave para que la ciudadanía pueda desarrollar una influencia directa sobre la administración pública y por tanto, parte importante en su construcción y curso.

Es importante que enfrentados al llamado electoral, entendamos tanto electores como candidatos, que la transparencia puede ayudar a mejorar la calidad de nuestra democracia, porque en la medida que mejoran las decisiones y las políticas públicas, iremos asumiendo una nueva forma de organización entre la ciudadanía y las instituciones públicas. Y en esa relación gana el país entero y podríamos lucir un Chile más fortalecido, transparente y democrático.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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