Psicoanálisis hoy; ¿mantiene su vigencia?

Hace un tiempo, en una reunión social, una persona a la que le comenté que yo soy psicoanalista, me hizo la misma pregunta del título de este articulo. Posteriormente, un colega me comentó que un paciente que asistía por primera vez a su consultorio, al ver el diván, este le preguntó ¿aún usan de estos?

Sucede entonces que esta es una pregunta que surge. Parece que a veces se puede asociar el psicoanálisis con algo antiguo, ya pasado, o que ya fue superado con los descubrimientos modernos. Esta creencia es curiosa ya que por otra parte existen muchas personas que en la actualidad acuden a un psicoanalista para resolver sus problemas. En estos momentos se está elaborando un libro en el que reconocidas personas del ámbito de las artes, de la literatura, del cine, etc. comentan sobre su experiencia psicoanalítica. Por otra parte, el mismo Papa Francisco en una reciente entrevista comunicó haber asistido a una psicoanalista para ayudarse en un periodo de su vida. Vemos entonces que, por una parte, es un tratamiento que es de elección para muchas personas, pero por otra parte surge esta duda sobre su vigencia.

Esta idea, la de la obsolescencia del psicoanálisis, es quizás una mirada que desea que todo pueda ser resuelto o con una pastilla o de forma rápida, adjudicando a la ciencia un progreso que habría dejado atrás el requerimiento de procesar y elaborar las emociones y los conflictos. Esta mirada es una creencia, que no se basa en los estudios de investigación que amparan el psicoanálisis, ni en la opinión de importantes neurocientíficos, como por ejemplo Eric Kandel (quién recibió el premio nobel de medicina el año 2000), que propugna por un encuentro entre las neurociencias y el psicoanálisis, y que plantea que “…el psicoanálisis todavía representa el más coherente e intelectualmente satisfactorio punto de vista de la mente”. Otro neurocientífico destacado, Antonio Damasio, señala que en los avances de las neurociencias ha encontrado concordancias importantes con el psicoanálisis (actualmente existe una rama denominada neuropsicoanálisis, que trabaja justamente en estos puntos de concordancia).

Es posible que la investigación de la terapéutica psicoanalítica muchas veces no ha sido tan frecuente como debiera; los clínicos tienden a distanciarse de las investigaciones, y por eso es que el último tiempo la Asociación Psicoanalítica Internacional (A.P.I.), ha estado invirtiendo recursos y ha estimulado numerosas investigaciones. La A.P.I. es la asociación fundada por Freud  en el año 1910 para estudiar y desarrollar el psicoanálisis, y en este sentido, como todo saber, busca trasmitir los principales descubrimientos de su fundador como son el inconsciente, la transferencia, etc, pero que por otra parte ha continuado desarrollando enormemente la teoría y la técnica.

Decía que culturalmente puede propenderse a que una pastilla lo resuelva todo, o que la solución sea fácil y rápida. Esto es algo en lo que el psicoanálisis constituye una oposición, ya que propugna el abordaje y elaboración de los conflictos y de las situaciones traumáticas. Busca más bien el desarrollo del aparato mental, lo que requiere un cierto tiempo. Tampoco es un método que sugiera respuestas y soluciones, ya que más bien colabora en que el individuo desarrolle herramientas para resolver. Se intenta que aquello no elaborado y que busca repetirse una y otra vez en la vida, pueda ser comprendido, simbolizado y de esta manera dar libertad a la persona y así realmente escoger. En este sentido, respeta y estimula la libertad de cada persona. Esto, a veces, hace emerger resistencias y un rechazo a esta intención.

Por otro lado, el psicoanálisis no se limita solamente a la intervención psicoterapéutica. Freud dijo que éste es, por un lado, un método de investigación, también un método psicoterapéutico, y un conjunto de teorías psicológicas y psicopatológicas. En este sentido, el método de tratamiento psicoterapéutico es sólo uno de los aspectos contenidos por el psicoanálisis. Otros aspectos son los intentos del psicoanálisis de colaborar en el entendimiento de situaciones sociales, en los que se integra conocimientos de otras ciencias como la antropología, la sociología, la biología, etc.  Esta mirada integrativa es hoy más necesaria que nunca, y es donde el psicoanálisis tiene una gran vigencia y oportunidad en aportar a la comunidad. Temas como el feminismo, la migración, las identidades sexuales, el fanatismo, solo por nombrar algunas temáticas, son tópicas donde la mirada psicoanalítica tiene mucho por decir.

Este año, la Asociación Psicoanalítica chilena (A.P.Ch.) cumple 70 años de existencia. La A.P.Ch. (perteneciente como sociedad componente a la A.P.I.) espera poder mantener y profundizar su intercambio, tanto dentro del psicoanálisis (desarrollando e intercambiando experiencia clínica), como con áreas externas, en intercambio con conocimientos afines (historia, antropología, biología, medicina, sociología, derecho), y así aumentar la presencia de ésta en la comunidad.