En este momento lo que más preocupa al Ejecutivo es la situación en que quedaría en caso de que altos funcionarios como el subsecretario de Transportes, Guillermo Díaz, y los intendentes Patricio Zapata y Ricardo Trincado fueran procesados. No obstante, confían en que al menos Díaz no sería encausado.
Aunque en el gobierno, a estas alturas, esperan el peor de los escenarios con nuevos procesamientos del juez Carlos Aránguiz por la "segunda lista" de los pagos de GATE, dicen estar tranquilos por la situación que vive Carlos Cruz pues "pueden meter las manos al fuego" respecto a que el ex ministro no se quedó con dinero y que actuó sin dolo, por lo que la figura invocada por el magistrado de fraude al fisco sería débil.
Pese a ello, saben que habrá un desfile de funcionarios públicos en tribunales declarando por el origen de los dineros con que se les pagaron honorarios por asesorías. De hecho, hasta ahora, el magistrado ha tomado declaración a por lo menos diez de los personeros que aparecen en la lista de un total de 75.
En este momento lo que más preocupa al Ejecutivo es la situación en que quedaría el gobierno en caso que altos funcionarios como el subsecretario de Transportes, Guillermo Díaz, y los intendentes Patricio Zapata y Ricardo Trincado fueran procesados.
No obstante, en el gobierno están confiados en que en el caso de Díaz, éste no sería encausado, pues según lo que ha informado el mismo afectado en numerosas visitas a La Moneda, las boletas de honorarios y los pagos provendrían de otra empresa. Sin embargo, no pueden asegurar lo mismo de la suerte que podrán correr Trincado y Zapata.
La situación de Cruz
Hoy, sábado en la mañana, a Carlos Cruz le fue denegada por Aránguiz la libertad bajo fianza, por «diligencias pendientes», a lo cual el ex ministro apeló. El martes los abogados de Cruz deberán alegar ante la Corte de Apelaciones de Rancagua para tratar de modificar la decisión de primera instancia.
El abogado de Cruz, Gonzalo Insunza, sostuvo ayer que "el derecho a libertad provisional bajo fianza está establecido en la Constitución. No vemos razón para que Carlos Cruz permanezca detenido".
En el gobierno, en tanto, consideran que el juez Aránguiz debió haberse tomado los cinco días para resolver si procesaba o no a los detenidos, pues su fallo no sería contundente, debido a que obvió temas como, por ejemplo, la falta de dolo en el caso de Cruz.
Además, insisten que tienen la certeza en que el ex ministro "no se quedó con ningún peso" de las platas de GATE. No obstante, reconocen que hubo falta en el sentido de un error administrativo, pero en ningún caso se podría calificar como fraude al fisco.
Según explican, para que haya fraude al fisco debe haber dolo y éste no es el caso de Carlos Cruz.
En este sentido, culpan de los errores o faltas administrativas a que habría estado mal asesorado. "El ex ministro de Obras Públicas tenía abogados y asesores que debieron aconsejarlo", comentan en La Moneda.
Lo que viene
Aunque en el gobierno estiman que podría haber algunos procesamientos aislados, juristas que le han seguido los pasos a Aránguiz opinan que si el ministro es consecuente debería procesar a todas las personas que aparecen en la segunda lista de GATE.
Si bien existe coincidencia de opiniones en este punto, cercanos al juez señalaron que de ser así se alargaría demasiado el proceso.
Por ahora, agregan, los citará uno a uno a declarar e intentará establecer el grado de participación y conocimiento que tenían estas personas respecto al origen de los recursos que percibieron.
Otra de las cosas que se deberá resolver es si la jueza del 17° Juzgado del Crimen de Santiago, Patricia González, quien ayer pidió los antecedentes del caso a Aránguiz, se declara competente y le pide la inhibitoria de competencia a Aránguiz, o decide entregarle el caso. Hasta ahora, todo indica que Aránguiz se quedaría con la causa.
Cruz, el hombre de mil amigos
Sin bien en algunos círculos se ha criticado la visita de autoridades de gobierno a Capuchinos, en La Moneda aseguran que ha sido espontáneo y que eso habla por si solo de la honorabilidad de Cruz, sobre todo la declaración que realizó ayer la secretaria ejecutiva de la Comisión Nacional de Energía, Vivian Blanlot, a favor del ex ministro ante Aránguiz.
Ayer recibió las usuales visitas, entre las que contaron las del ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre; los subsecretarios Jaime Pérez de Arce, Felipe Sandoval, Felipe Harboe y Gabriel Gaspar. También recibió la visita del ex ministro Enrique Correa; los senadores Fernando Flores, Carlos Ominami y Ricardo Núñez; el ex director de Vialidad, Eduardo Arraigada; los diputados socialistas Isabel Allende, Juan Bustos y Carlos Montes; el asesor presidencial Sergio Galilea; el ex subsecretario Eduardo Dockendorff, la ex ministra Alejandra Krauss y el director del INE, Máximo Aguilera.
Sin embargo, la visita que sorprendió fue la del ex subsecretario de Transportes, Patricio Tombolini, quien acompañó al acusado durante cuarenta minutos.
"Es muy importante que en nuestro país se entienda, de una vez por todas, que nadie es culpable mientras los Tribunales de Justicia no lo sancionen", dijo Tombolini quien vivió el encierro durante más de un mes, aunque sin tantas visitas.
Añadió que "soy inocente mientras los Tribunales de Justicia no demuestren lo contrario. Creo que en el caso de Carlos, felizmente ha operado ese principio".
Todos los visitantes coincidieron en que Cruz está tranquilo y señalaron además que la concurrencia en ningún caso es una presión ante el posible veredicto.
En tanto, el senador Ominami reiteró su convencimiento de que no hubo 78 personas confabuladas para defraudar al fisco. Además dijo esperar que en el curso de la investigación el caso se clarifique.
"Carlos es una persona fuerte, creo que está sacando mucha fuerza de ánimo, y creo que cuando uno sabe que es inocente, cuando sabe que aquí están las obras por las cuales ha trabajado, me parece que puede estar bastante más tranquilo", enfatizó.
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