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Lagos encabeza ceremonia del borrón y cuenta nueva

A través de este ritual, el Presidente y la Concertación asumirán ante el país la responsabilidad que les cabe por los hechos irregulares que afectan a parlamentarios y funcionarios públicos y, al mismo tiempo -con Pablo Longueira como artífice- se comprometerán a generar políticas de modernización del Estado a fin que tales sucesos no se repitan.


Si un discurso común unificó al gobierno, la Concertación y la oposición estas últimas semanas fue que las crisis deben generar oportunidades para superarlas. Esta certeza se convirtió en el fundamento del protocolo de acuerdo sobre los diferentes temas que abordará la Agenda de Reforma del Estado y Transparencia hacia la cual convergió todo el espectro político que, encabezado por el Presidente Ricardo Lagos, se comprometerá esta mañana ante la ciudadanía a sacar adelante, durante el año 2003, los proyectos que el documento contiene.



En el Salón Montt Varas de La Moneda, el Mandatario presidirá la ceremonia en la que no sólo se darán a conocer los temas en que el ministro del Interior, José Miguel Insulza, logró poner de acuerdo a las alianzas oficialista y de oposición para reafirmar la institucionalidad debilitada, sino también las prioridades de la agenda y el calendario de los diferentes proyectos. En el mismo acto, el jefe de Estado promulgará las leyes relativas a la remuneración de los altos funcionarios de gobierno, ONGs y gastos reservados.



Aunque ayer miércoles continuaron los intercambios de opiniones entre Insulza y los partidos para afinar la agenda, particularmente con los de oposición, el secretario de Estado salió al paso de las dudas que se pudieran generar al respecto, asegurando que nada impedirá que el acto de hoy se realice puesto que existe acuerdo general en los temas que contendrá la Agenda que apunta especialmente a la transparencia, gestión pública y agenda pro crecimiento, lo que se traduce en un conjunto de 42 proyectos y medidas, de los cuales 18 ya están en trámite en el Congreso.



Entre las 42 materias a abordar, la Agenda contempla proyectos relativos al financiamiento de la política, dividido en financiamiento de los partidos, de las campañas, límite al gasto electoral y transparencia del origen y destino de los recursos; redefinición del fuero parlamentario, transparencia de los recursos del Congreso, reducción de los cargos de confianza, cargos concursables de la administración pública, Ley Orgánica de la Contraloría, fortalecimiento de la regionalización y de los municipios y compras públicas por licitación.



Asimismo, se contempla reimpulsar la Agenda Pro Crecimiento, acelerando iniciativas que ya están en el Congreso, como la Ley Eléctrica, e incorporando otras que aún no ingresan a trámite legislativo.



Las últimas reuniones



Pero la esperada ceremonia, en que el dirigente opositor Pablo Longueira participará en calidad de artífice de la reforma del Estado, no es todo. Previo a ella, Lagos sostendrá una serie de encuentros. Comenzará su jornada oficial, a las 10:20 de la mañana, reuniéndose con el timonel de Renovación Nacional, Sebastián Piñera, en un encuentro privado con el que, de alguna manera, lo compensará por la publicitada reunión que sostuvo antes con el presidente de la UDI y en la que RN se quedó abajo. En la tienda de Piñera esperan que con esto el Mandatario de una señal de equidad en el trato con la oposición.



Posteriormente, alrededor de las 10:50, Lagos recibirá a los presidentes de la Concertación y a las 11:20 a todos los jefes de partidos con representación parlamentaria. Tras este encuentro, al mediodía, el Mandatario encabezará el acto en que el gobierno y la Concertación asumirán ante el país la responsabilidad que les cabe por los hechos irregulares que afectan a parlamentarios y funcionarios de gobierno y, al mismo tiempo, bajo la benigna mirada de la Alianza por Chile- se comprometen a generar políticas de modernización del Estado a fin que tales sucesos no se repitan.



El compromiso que asumirán el gobierno y los partidos políticos es que los proyectos contenidos en la agenda se aprobarán durante el presente año. Algunos de ellos son de corto trámite puesto que ya están en discusión en el Congreso o porque ya existe un acuerdo generalizado sobre ellos, como es el caso del límite del gasto electoral, la reducción de los cargos de confianza y la regionalización. Estos proyectos ya consensuados integran el paquete que se aprobaría antes del 21 de mayo, junto con los de transparencia, gestión pública y algunos de la Agenda Pro Crecimiento, los tres macro temas en que se se divide la Agenda de Modernización.



El día después del acuerdo



Si algo evitaron los gestores del acuerdo para la Agenda de Modernización del Estado -gobierno y UDI- fue entrar en el debate de fondo de los temas. Esto, porque existe conciencia que es en esta fase donde surgirán las divergencias.



En este aspecto, la Concertación fue disciplinada, tal vez porque existe consenso en mayor parte de los temas o, al menos, en que era necesario generar un ambiente de acuerdo para poder dar pie al debate de fondo de los diferentes tópicos enunciados.



La Alianza por Chile, en cambio, continuando con su tradición de carencia de orgánica, estuvo a punto de trenzarse en un debate inconducente en torno al financiamiento de la política. La divergencia entre RN y la UDI en esta materia es notable, ya que mientras los primeros optan por abocarse al financiamiento de las campañas, sus aliados prefieren enfocar sus energías hacia el financiamiento de los partidos.



Sin embargo, en este punto de la agenda de modernización del Estado, Renovación Nacional parece ser minoría y no sólo frente a sus socios, sino también ante la Concertación, pues hasta ahora ningún partido oficialista se ha manifestado opositor al financiamiento público de los partidos políticos, como sí lo hizo RN.



Tanto es así, que en el caso particular de la Democracia Cristiana, por ejemplo, incluso han efectuado una propuesta en tal sentido, sugiriendo la posibilidad que el Estado subsidie a los partidos en algún porcentaje de lo que éstos reciben de sus militantes.



El financiamiento de la política, centrado en las campañas, es prioritario para la Concertación en particular por la cercanía de las elecciones municipales 2004. Por lo que en el oficialismo trabajaron para colocarlo entre los proyectos que deberán ser aprobados antes del 21 de mayo.



No obstante, la discusión en la mayoría de los casos, se dará en el Congreso, ya que el compromiso del gobierno es enviar los proyectos para que se debatan allí y respecto de los que ya están en trámite, se trabajará sobre esas iniciativas vía indicaciones.



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