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Minvu impulsa polémica expansión de Santiago hacia zonas «inundables»

La Secretaría Ministerial Regional del Ministerio de Vivienda propone la ampliación del límite urbano de la comuna de Quilicura hacia un área considerada de "alto riesgo natural de inundación", en la cual pretende que se levanten complejos habitacionales.


En la búsqueda de nuevos territorios para la edificación de viviendas, la Secretaría Regional Ministerial de Vivienda y Urbanismo la Región Metropolitana hizo llegar al Consejo Regional Metropolitano una propuesta de expansión del límite norte de la comuna de Quilicura.



El punto de mayor controversia de esta modificación radica en la urbanización de terrenos que han sido "vetados" por Plan Regulador Metropolitano de Santiago por ser áreas de "alto riesgo natural geofísico" y de recurrentes inundaciones producto del desborde del Estero Las Cruces, además de ser "áreas que presentan problemas de afloramiento de aguas subterráneas".



Según el informe del seremi de Vivienda de la Región Metropolitana, Víctor Manuel González, estas restricciones son subsanables a través de la aprobación de estudios y proyectos específicos aprobados por el ministerio de Obras Públicas, "en los cuales se detalle los límites del área inundable y las obras que deben realizarse para protección de los desarrollos urbanos".



Para el profesional la expansión en un lugar de afloramiento de aguas subterráneas "no tiene inconvenientes para la urbanización salvo cumplir con algunas normas técnicas, referidas a la profundidad de la napa respecto del piso terminado y sellos de fundación".



Es la ampliación de la frontera de urbanización permitiría habilitar más de 600 hectáreas para el uso habitacional mixto, lo que llevaría asociada la canalización del Estero Las Cruces, la habilitación de un Parque Intercomunal y una vía costanera adyacente al cauce.



El problema, según los críticos de la iniciativa, radica precisamente en las constantes salidas de madre del Estero que, en años anteriores a inundado el sector. Por ejemplo, durante los temporales del 2002, el municipio de Quilicura alertó de los daños provocados por el desborde del estero que inundó terrenos agrícolas de Lampa y amagó a más de 40 mil habitantes de la zona sur del mismo.



La amenaza de desborde del estero se agravada al ser utilizado, históricamente, su curso como basural clandestino. Sin ir más lejos, el invierno pasado la municipalidad y el ministerio de Obras Públicas se responsabilizaron mutuamente por su limpieza, disputa de la cual la prensa dio cuenta.



Cruzando el límite



De acuerdo al documento enviado al Consejo Regional, la iniciativa surgió en respuesta a los problemas de saturación y crecimiento urbano que presenta, actualmente, la comuna de Quilicura, la que tendría como "única opción de crecimiento urbano hacia el norte del límite actual". Entre los fundamentos que se esgrimen para la expansión están el crecimiento "explosivo" de la población comunal -6,2 por ciento anual- desde la década del 70, según da cuenta el informe.



Entre los fundamentos para impulsar la iniciativa se explicó que el municipio busca, desde 1999, expandir sus fronteras.



El oficio indica, que el muncipio le consultó el año 2001 al seremi de Obras Públicas sobre la modificación y éste respondió que el plan maestro de aguas lluvias sería el encargado de definir el área de inundación del Estero Las Cruces, canales afluentes, tuición, limpieza, obras de defensa y financiamiento. Trabajos que permitirían fijar el límite norte urbano de Quilicura en atención a "evitar riesgos por inundación asociados al Estero Las Cruces".



Asimismo, el documento consigna que, en 1997, el Gobierno Regional incorporó la provincia de Chacabuco, considerando en su desarrollo el control el encauzamiento de las aguas lluvias y que "en particular se definió como principales vías de evacuación los esteros de Lampa, Colina y Las Cruces. En este sentido la construcción de defensas de estos en sectores de riesgo se hace prioritario", remarca el informe.



El administrador municipal de Quilicura, Marcel Méndez, refutó el informe y aclaró que "el municipio no está patrocinando acciones de esta naturaleza, por ahora. Estamos abocados a estudiar el Plano Regulador local y no a planes seccionales como este. Por otra parte, los datos que se entregan en este informe aluden a necesidades que la comuna tenía hace varios años y no a la realidad actual pues se han solucionado los problemas habitacionales de sus vecinos".



Pese a que el proyecto no ha sido aprobado todavía, la Secretaría Regional Ministerial de Vivienda puede impulsar la iniciativa de forma independiente. Entre los críticos a la idea se estima que tras el proyecto existen presiones de edificar de parte de grupos inmobiliarios dueños de los predios.



Dudas



El proyecto está siendo evaluado en el municipio y de ser presentado, su estudio pasaría a manos de la Comisión Regional del Medio Ambiente y luego sería evaluado por el Consejo Regional.



El consejero regional y presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano y Territorial, Patricio Salinas, aseguró que en Lo Barnechea y La Reina se han vivido experiencias similares con la ampliación del límite de esas comunas hacia zonas calificadas como de riesgo de remoción en masas o afectadas por desplazamiento de tierras. "Para aprobar una propuesta así se estudiaron las medidas adecuadas para que no afecte a la comunidad en caso de que se construyan proyectos", aseveró.



Salinas aseguró que el proyecto de ampliación urbana de Quilicura es "riesgoso a simple vista y a la luz de la experiencia de otras comunas -como Maipú- donde las lluvias han afectados a viviendas emplazadas en dichos sectores".



El consejero regional y presidente metropolitano del PPD, Pedro Saitz, explicó que "es una mala señal" construir en zonas inundables y que "se debería exigir que la comunidad esté informada que sus viviendas están en un sector que podría inundarse en las próximas lluvias para que se tomen las medidas pertinentes".



Saitz agregó que en ese sector "no se debería construir pues las ordenanzas así lo indican" y que, en caso de materializarse el proyecto "se debería exigir un sistema de colectores de aguas lluvias efectivo para que no sucedan los desastres de cada invierno".

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