Desvirtuando la defensa institucional que esbozó públicamente, la máxima autoridad de la Casa de Bello declaró -en el Séptimo Juzgado del Crimen, el 14 de marzo- que las «irregularidades» eran imputables al ex director del Ciade y que él las «ignoraba» hasta que fueron reveladas por la prensa o los tribunales.
Un respiro obtuvo el Rector de la Universidad de Chile, Luis Riveros Cornejos, cuando se enteró que su nombre no figuraba en la nómina de los 28 nuevos procesados por el juez del Séptimo Juzgado del Crimen de Santiago, Alejandro Rivera, en el denominado caso MOP-Ciade. Tensión que podría volver, ahora, que la causa pasa a manos de la ministra en visita Gloria Ana Chevesich.
El viernes pasado, Rivera sometió a proceso a 13 seremis -ocho de ellos en ejercicio- y 9 académicos y funcionarios de la Casa de Bello, en una investigación que se inició por una denuncia de la Contraloría General de la República a comienzos de enero de 2003, en que se cuestionó un contrato suscrito por el MOP con el Centro Investigación Aplicada para el Desarrollo de la Empresa (Ciade) de la Facultad de Economía de la U. De Chile.
Si bien Riveros no fue imputado jurídicamente, esto no significa que no vaya a ser requerido, nuevamente, por los tribunales, ya que parte de su "entorno" más cercano fue «tocado» por el juez Rivera antes de entregarle la causa a la ministra Chevesich. Entre los nueve académicos y funcionarios encausados por fraude al fisco, negociación incompatible y estafa, figura Armando Álvarez Trujillo, director administrador de la Casa Central del plantel.
Si bien la atención se ha centrado en los procesamientos de los seremis de Obras Públicas, resolución que golpea a un ministerio que ha estado virtualmente paralizado desde que estallaron los escándalos de coimas y sobresueldos, el panorama para la Universidad de Chile es bastante complejo.
Se espera que cuando la ministra Gloria Ana Chevesich inicie el estudio de lo investigado por Rivera, decrete nuevas diligencias, entre ellas un peritaje contable a la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la "U" que permita establecer el destino de un poco más de 24 millones de pesos faltantes que nadie ha podido justificar. Y, probablemente, se investiguen otros contratos celebrados, que eventualmente podrían llevar a otras irregularidades.
El rector Riveros ha prestado en dos oportunidades declaraciones ante la justicia: la primera ante la ministra que investiga el caso MOP-GATE, y después ante el juez Rivera. En ambas ocasiones, el responsable de la Casa de Bello manifestó un desconocimiento total de los hechos que se investigan en la justicia, declarando que "él se enteró por la prensa" de las irregularidades que se estaban indagando al interior de la universidad que dirige.
Tanto era el "desconocimiento" del rector que tuvo que concurrir por segunda vez ante el juez Rivera, donde fue careado con Ricardo Paredes y Nassir Sapag, para aclarar puntos contradictorios en sus testimonios. Ambos académicos procesados integraban el círculo más cercanos de Riveros cuando ocupó el decanato de Economía.
El Mostrador.cl tuvo acceso a la declaración judicial presentada por Luis Riveros ante el Séptimo Juzgado del Crimen de Santiago. En ella, exhortado a "decir la verdad", el rector se desliga de toda responsabilidad en los hechos investigados, especialmente de su periodo como decano, pero admite la eventual existencia de "irregularidades" en los procedimientos utilizados por el Ciade y el Instituto de Economía, a la hora de materializar el contrato con el MOP.
En su declaración -que consta de cuatro carillas- Riveros aclara que el Ciade siempre fue responsabilidad de Nassir Sapag y que durante su gestión como decano de la Facultad de Economía, entre 1994 y 1998, "no hubo irregularidades".
"Siempre fue director don Nassir Sapag, era una persona que tenía mucha antigüedad en la facultad, desde mediados de los 70, siempre a cargo de Ciade, su designación se debe al consejo de la facultad, en que yo era decano, rendía cuenta al decano, y por esa vía al consejo, en el tiempo en que yo estuve no existió irregularidad alguna, que hiciera necesaria mi intervención".
Por la prensa
Con relación al conocimiento que tenía la máxima autoridad universitaria del contrato investigado por el magistrado Rivera, el rector responde que sólo vino a tomar conocimiento de esta situación a través de la prensa:
"En relación al contrato investigado por este tribunal llamado ‘Diseño e Implementación de un Sistema de Evaluación de Propuestas Públicas y Contratos a Nivel de Secretaria Regionales Ministeriales de Obras Publicas’, celebrado entre el Ministerio de Obras Publicas, suscrito por Ricardo Paredes Molina, ex decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de mi universidad, sus detalles los he conocido a través de la prensa".
Y agrega que: "Debo señalar que como rector de la Universidad de Chile, no me corresponde velar por el cumplimiento de los diferentes contratos y convenios, más de 1500 en un año en esa facultad, pues para eso están las respectivas autoridades de las áreas respectivas y el propio director de Ciade".
Los negocios de Sapag
Respecto a las sociedad Necul-Hual que tenía el ex director del Ciade con su esposa, Cristina Bonilla, procesados por fraude al fisco y estafa, respectivamente, Riveros, una vez más se declara "ignorante" ya que nunca se enteró de ello, reconociendo que puede haber una falla en "el servicio de control y de legalidad" internos que no detectaron la autocontratación de la empresa Sapag-Bonilla, por parte del director del Ciade.
"Respecto de la contratación de todos los Secretarios Regionales Ministeriales de Obras Públicas, del Instituto de Economía y de la sociedad Necul-Hual, respecto del cual ignoraba que fuera de propiedad del Sr. Sapag y su cónyuge, lo desconocía, debo reconocer que nuestro servicio de control y de legalidad fallaron, pues los hechos que me señala el tribunal y la documentación que se me exhibe parece ser irregular, y hay errores administrativos de consideración, sin prejuicio de las responsabilidades criminales que este tribunal de su investigación determine".
"Yo dejé la facultad en 1998, por lo tanto no tenía conocimiento de las irregularidades que se han señalado por este tribunal y de las que tomé conocimiento solamente por la prensa de los últimos días y que en este momento me impongo personalmente como hechos de la causa".
Doble pago a Seremis
Sobre el pago de cheques dobles a los secretarios regionales -que aparecen en la contabilidad de la Facultad de Ciencias Económicas y Administración-, Riveros respondió al requerimiento del juez que los primeros fueron cobrados efectivamente y que los segundos se reintegraron a las cuentas corrientes de la facultad, "resultando una faltante millonaria, lo ignoraba por completo, son a todas luces actos antirreglamentarios y no se puede dar excusas de que así se hacia en forma usual", sostiene el texto respuesta.
La misma sorpresa manifestó el rector al ser consultado por los contratos firmados en días inhábiles con empresas pertenecientes a académicos de Economía. "El haber celebrados contratos en días feriados, como el que se me exhibe entre el ex decano Paredes con el Instituto de Economía, el 1 de enero de 2002, o el celebrado a partir de este convenio madre con Necul-Hual, que aquí me entero oficialmente que es de propiedad del Sr. Sapag y su cónyuge, en que aparecen cobrando una suma cercana a los 12 millones por trabajos prestados, lo ignoraba".
Asimismo, en su declaración, el rector deja "constancia" de las investigaciones realizadas sobre "errores administrativos y jurídicos podrían derivar en sanciones penales, de todo lo cual fluye la necesidad de haber contado con un equipo jurídico que asesorase, debió haber contado con un apoyo especifico, pero ignoro qué fue lo que ocurrió, pero de haber existido ello habría impedido todas estas irregularidades".
Para Riveros, la utilización de empresas subcontratadas, como Necul-Hual, o del Instituto de Economía, para pagar "comisiones de servicios", se aleja del objetivo fijado por la autoridad al crear entidades prestadoras de servicios al interior de la Facultad de Economía. "No están para eso, para eso existen las llamadas asignaciones de productividad, donde se premian aspectos de gestión de los académicos", agregando a renglón seguido que: "jamás fue creado el Instituto de Economía como caja para pagar premios, su origen fue fundamentalmente obtener proyectos financiados, especialmente internacionales, y cursos de extensión".
Igual "molestia" manifestó Riveros al "enterarse" del contrato suscrito por el Instituto de Economía, presidido por el académico Miguel Basch quien, al igual que Ricardo Paredes, era socio del instituto. Convenio que "me parece no conveniente", asegura el rector de la U.
Finalmente, Riveros explica que la decisión de trasladar el Ciade a Casa Central fue tomada tras una conversación con el actual decano de Economía, Joseph Ramos. "Concluimos que el Ciade había que repensarlo", derivando en la idea de crear, en Casa Central, "un nuevo proyecto llamado Universidad-Empresa", que quedaría bajo la tuición de Nassir Sapag y la supervisión de la vicerrectoría de Investigación y Desarrollo. Idea que, sin embargo, no pasó de la etapa de implementación al abrirse la investigación que hoy tiene procesados a los principales implicados en el caso MOP-Ciade.
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