Aunque por ahora está la idea y no los datos que digan de manera fidedigna cuántos serán los recursos que se recuperarán por este camino, el ministro de Educación, Sergio Bitar, aseguró que por esta vía se podrá priorizar mejor la entrega de recursos. La iniciativa pretende hacer cumplir la ley y operaría a contar del 2005.
El Gobierno anunció una reforma al sistema de créditos para universitarios que se iniciará el 2005: se limitará los beneficios económicos a los estudiantes que superen el tiempo establecido por la casa de estudios para terminar una carrera.
Aunque el objetivo es enfocar los recursos en los alumnos más pobres, con puntajes superiores y con buen rendimiento, al interior de algunas federaciones se habla de que son medidas para paliar el alza de aranceles de las casas de estudios ya que éstas, en general, derivan en un aumento de petición de créditos estudiantiles.
El ministro de Educación, Sergio Bitar, explicó que "si hay un joven que lleva en la universidad, en vez de cinco años que dura la carrera, siete u ocho, repite, y no estudia, no se puede seguir otorgando crédito porque hay otros que pueden aprovechar mejor este dinero. Por eso se pondrá límites en esa materia".
Reiteró que la situación de los créditos es insostenible. "Hoy para mantener las becas y créditos basta con que haya una evaluación de la universidad. Pero vamos a ser más estrictos ahora porque creemos que los recursos tienen que ir a los jóvenes que estén haciendo esfuerzos", dijo.
En tanto, la jefa de la División de Educación Superior, Pilar Armanet, en conversación con El Mostrador.cl, confirmó que esta será una de las medidas que se analizará durante el 2004 dentro de la llamada reingeniería de la educación superior y que comenzaría a regir para los estudiantes el próximo año.
"Este es uno de los temas más importantes que se tratará este año. Se van a limitar los créditos a los alumnos que permanezcan mucho tiempo en las universidades sin finalizar sus carreras", dijo.
Armanet explicó que el objetivo es que se aplique "mayor rigor" al sistema. Algunas universidades tienen su propia forma de otorgar beneficios los que no van de acuerdo con los requerimientos actuales.
Para esto se está haciendo un catastro en las universidades para conocer cuál es el número de alumnos que se encontrarían en esta situación y cuáles son los planteles que tienen más alto número de créditos por este concepto.
Por ahora, solo está la idea y no los datos, que digan de manera fidedigna cuántos serán los recursos que se recuperarán por este camino y a quiénes afectará.
Unos 30 mil estudiantes solicitan créditos cada año y que unos 28 mil de ellos lo obtiene. El gobierno entregó 60 mil millones de pesos el 2003 para beneficios y dio 3.500 extra. Este año se estima que se llegará a 100 mil millones en ayudas.
Períodos de gracia
La Ley 19.287 entrega como plazo máximo para dar créditos 1,5 años más que los años que dura la carrera. En algunas instituciones se otorga hasta la mitad del tiempo en que se termine la carrera, es decir, si la carrera dura 5 años, el período de gracia es de 2,5 años.
Sin embargo, en la práctica, esto no se ha cumplido debido a que muchos planteles siguen otorgando los beneficios a estudiantes que tienen permanencia larga en las aulas.
La semana pasada, el Mineduc anunció el primer cambio a los requisitos para obtener los créditos: se estableció como piso 475 puntos en el test de ingreso a las universidades, 25 más que los años anteriores. Las autoridades detectaron que bajo ese resultado, había una mayor deserción de alumnos de las casas de estudios por lo que las ayudad eran inutilizadas.
Para las dos de las más importantes becas entregadas por el Estado como son la Bicentenerio (ex Mineduc) y Juan Gómez Millas, que financian hasta un millón de pesos anuales para aranceles, también se subieron las exigencias en puntaje a 600 puntos en la PSU. Unos siete mil alumnos podrían obtenerla este año debido a que estuvieron dentro de ese rango de resultados en la medición para ingresar a las Ues.
Terminar con el círculo vicioso
El vicepresidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), Rodrigo Henríquez, aseguró que no existe una postura oficial de la federación sobre el tema de los créditos, pero asegura que "con las medidas que ha tomado el Gobierno se pide a los estudiantes que tengan mejores puntajes para obtener beneficios y a la vez se les hace mayores exigencias".
Agregó que "no deben haber acciones restrictivas con los alumnos debido a que el Estado debe dar recursos para la educación y no seguir el círculo vicioso de que los planteles suben aranceles y el Gobierno baja beneficios para suplir la demanda de créditos".
El secretario general de la Federación de Estudiantes de la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTEM), Boris Peralta, explicó que la medida le parece que hay que estudiarla »caso a caso» debido a que muchos estudiantes postergan sus carreras por problemas económicos, "no postergan porque sí».
Agregó que debido al alza de los aranceles experimentadas por las distintas a fines de diciembre en las universidades del Consejo de Rectores "el Gobierno probablemente quiera sacar fondos de un lugar y ponerlo en los créditos de las personas nuevas. Es una medida que se debe estudiar junto con las autoridades de cada plantel debido a que en algunos casos se puede perjudicar a quienes realmente lo necesitan".
El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Tarapacá, Forlin Aguilera, sostuvo que la política del Gobierno de rebajar becas y créditos a los alumnos tiende a que "El Estado se desentienda de los problemas de los jóvenes y a privatizar el sistema".
Añadió que en caso de que la medida se concrete "se debe conversar con el Gobierno para hacerle ver que los casos se deben estudiar muy bien pues siempre se debe tender a favorecer a los alumnos y no a perjudicarlos".
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