«Quiero demostrar que no hay que ser millonario para vivir bien»

Después de la batalla mediática que la Concertación tuvo que librar para decidir quién era el candidato por la municipalidad de Santiago, los partidos que la integran se pusieron de acuerdo y optaron por quedarse con Jorge Schaulsohn, en desmedro del intendente Marcelo Trivelli, para que suceda en el cargo a Joaquín Lavín, recuperando así la comuna para el oficialismo.



Largas negociaciones que terminaban en acuerdos que no duraban una semana, discusiones internas, enojos de los radicales y socialistas, fueron el escenario previo al pacto final en el que la Concertación proclamó a Schaulsohn como su candidato.



Sin embargo, después de siete años alejado de la política, quien en 1993 fuera elegido diputado PPD por Santiago, con la más alta mayoría, hoy se siente absolutamente convencido que será "el mejor alcalde que haya pasado por Santiago" y para lograrlo, ya comenzó su campaña.



Con un proyecto de trabajo que, según él, lo conducirá directo a la municipalidad, Jorge Schaulsohn ya comenzó su campaña política en terreno con el tradicional puerta a puerta, recorriendo diversos sectores de la comuna.



Además de haber iniciado la campaña política, Schaulsohn tiene definidos cuáles serán los lineamientos generales de su gestión alcaldicia. Pretende acabar con el comercio ilegal en seis meses, combatir en "forma implacable" la delincuencia, recuperar el casco histórico, resucitar los barrios tradicionales, y su máxima aspiración: "darle a la gente de Santiago la calidad de vida que tiene una persona que vive en Las Condes o Vitacura. Quiero demostrar que no hay que ser millonario para vivir bien".



– Después de ocho años de retiro voluntario de la política, ¿por qué volver ahora y como candidato a alcalde por Santiago?
-Soy candidato a alcalde porque quiero ser el mejor edil que haya pasado por la comuna de Santiago, en los últimos 40 años, y estoy convencido que lo seré. No quise ser parlamentario otra vez porque creo que el alcalde la lleva, además sé cuales son los problemas, sé cómo solucionarlos y tengo la mejor voluntad para hacerlo.



– El lema de la campaña sería algo así como Schaulsohn la lleva?
– No, aún no tengo definido cuál será el lema. Pero tiene que ser algo ganador, porque estoy convencido de que llegaré a la Municipalidad de Santiago a fines de octubre.



– ¿Cuáles son los problemas y cómo los solucionará para ser considerado el mejor alcalde de los últimos 40 años?
-Bueno, el comercio ilegal con el que pretendo acabar en seis meses. No quiero que las calles de Santiago se usen para comercializar discos, perfumes u otros artículos robados. Quiero recuperar el centro, los espacios públicos. Quiero que sea un lugar para pasear, para divertirse. También hay que regular mucho más el comercio ambulante que es legal y necesitamos recuperar el casco histórico de la comuna, resucitando barrios tradicionales como Franklin, por ejemplo.



-La educación es un tema que hay que potenciar para que los jóvenes puedan optar a mejores empleos. Y la delincuencia la combatiré de manera implacable, con todo lo que sea necesario. En suma, quiero cambiarle el pelo a la comuna y lograr que la gente de Santiago viva tan bien como la gente de Las Condes o Vitacura.



Campaña limpia y transparente



Una vez que la Concertación nombró a Jorge Schaulsohn como el elegido para la comuna de Santiago, Joaquín Lavín, que debía decidir quién era el candidato de la Alianza por Chile, proclamó a Raúl Alcaíno como candidato para sucederlo.



La elección de Lavín vino después que recibiera la señal de Pedro Sabat -la carta de Renovación Nacional para Santiago-, en orden a que no competiría por la capital. A través de una misiva, el edil ñuñoíno anunciaba que su candidatura no tenía razón de ser si el intendente de Santiago, Marcelo Trivelli, no era su contrincante.



Así las cosas, es el ingeniero civil y ex animador de televisión quien competirá por el sillón edilicio, junto a Jorge Schaulsohn.



– ¿Qué le parece competir con un novato en política?
-Raúl es una persona decente y honorable, igual que yo. Nos hemos comprometido a tener una campaña limpia, no nos agarraremos a castañazos durante el período de campaña. Y aunque esta es la primera incursión en política de Raúl, sé que lo que no sepa lo aprenderá en el camino.



– Hace un tiempo invitó a todos los candidatos a ir a una notaría y comprometerse a cumplir con la ley de financiamiento electoral, ¿Alguien ha aceptado su invitación?
-Efectivamente hice esa invitación, pero hasta el momento nadie ha querido aceptarla.



– Quizás porque la ley no establece sanciones para quienes no cumplan con las disposiciones que en ella figuran.
-Puede ser, pero aunque la ley no establezca sanciones los candidatos deben tener el compromiso moral y ético de no sobrepasar los límites. Si no lo hacen, quiere decir que no sienten ese compromiso moral.



– Si nadie lo secunda en su iniciativa de comprometerse ante notario para cumplir la ley, ¿usted irá solo a la notaría?
-La idea es que vayamos todos los candidatos, o la mayoría de nosotros a la notaría y nos comprometamos públicamente a no sobrepasar los montos estipulados en la ley.



– Pero si nadie lo sigue en su idea, ¿lo hará?
-Si nadie lo hace, lo haré yo, porque siento ese compromiso moral de cumplir con la ley y de hacer transparente el financiamiento de las campañas electorales.



– ¿Cómo financiará su campaña?
-A través de donaciones que se realizarán en internet. Ahí estará todo publicado, el monto que se lleva recaudado, en qué fue utilizado el dinero; todo lo que la gente quiera saber lo encontrará. No quiero donaciones anónimas. Quiero que mi campaña sea absolutamente transparente y que la gente se sienta partícipe de ella. Por lo mismo, acepto aportes desde un peso en adelante, lo que las personas quieran darme lo aceptaré. No soy fijado en ese aspecto.



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