La insistencia en conseguir las comunas de San Bernardo, Calama, San Fernando y Rancagua no sólo busca aumentar el electorado de la colectividad, sino también tener comunas «visibles» que les asegure presencia en los medios. Para esto también buscan candidatos con perfil »mediático».
La negociación por las comunas de San Bernardo, Calama, Rancagua y San Fernando entre el Partido Radical y la Democracia Cristiana -y que mantiene en stand by la firma del acuerdo electoral de la Concertación- no es sólo por lograr unos «votos más», sino también porque la colectividad estima que estas comunas podrían darle una mayor visibilidad.
En las municipales pasadas el partido obtuvo un 5,42 por ciento de la votación, con 115 concejales electos y 17 alcaldes. Para las elecciones de octubre de este año, el PRSD aspira a obtener 40 alcaldes y a aumentar, al menos, entre 20 y 30 por ciento su elección de concejales.
Sin embargo, saben que esta tarea no será fácil, especialmente en la Región Metropolitana. En regiones, aseguran, será más fácil, pues la actividad política «es menos mediática, lo que nos asegura una buena opción, ya que tenemos un buen trabajo de bases».
Aunque -según dicen- en la Región Metropolitana tienen un buen trabajo de bases, especialmente con dirigentes de juntas de vecinos, «ellos no tienen ninguna opción porque no son mediáticos, no aparecen en la televisión y, por lo menos, en Santiago, la televisión es la que manda».
«Los principios radicales están plenamente vigentes, las ideas también, el problema que tenemos en el partido es que debemos entender que la forma de hacer política cambió. Hoy es mediática y mientras los dirigentes no se allanen a hacer cosas más televisivas y dejar de ser tan serios, no tendremos ninguna posibilidad de aumentar nuestro electorado», asegura un diputado de la colectividad.
Los intentos mediáticos del PRSD
En la elección parlamentaria pasada, una de las sorpresas la dio la actual subsecretaria de Previsión Social, Macarena Carvallo. Con una fuerte campaña mediática -que incluyó un lanzamiento en benji– obtuvo un 15,49 por ciento en el distrito 23, que reúne a las comunas de Lo Barnechea, Las Condes y Vitacura.
El martes pasado, fue la actriz porno Reichell quien firmó el fichaje en la tienda radical, lo que le significó al partido una publicidad y asistencia de la prensa que hace meses no tenían.
Aunque Reichell sólo firmó su militancia en la juventud, ya anunció sus esperanzas por convertirse en diputada de la colectividad e incluso sus tópicos de campaña: apoyará el uso de la píldora del día después y se preocupará por las prostitutas callejeras y por los mendigos de la Vega.
«Esto confirma que hay que renovarse, mantener nuestros ideales, pero a la vez innovar y ponernos al día con la forma de hacer política actual», asegura un dirigente del partido.
En esta misma línea está la candidatura a concejal por Recoleta de Leonardo Barrera, director de películas como Hanito, el genio del placer, Historia de una adolescente ninfómana -donde Reichell es la protagonista- y Apelación sexual.
2 de junio: plazo fatal
Pese a que ya se están buscando los candidatos y la meta de los partidos de la Concertación es que los nombres de los concejales se resuelvan a más tardar a fines de junio, en el Partido Radical aún preocupa la negativa de la Democracia Cristiana a negociar con ellos las comunas donde -aseguran- tienen un mejor derecho: San Fernando, San Bernardo, Calama y Rancagua.
Aunque aseguran que la disputa por Traiguén -que mantenían con el PPD- ya fue superada y que la tienda de Víctor Barrueto habría cedido la localidad, en la colectividad descartan de plano esta situación, por lo que esta localidad se sumaría a las «conflictivas» para los radicales.
En el PRSD se quejan de que la negativa de la DC, a cederles las comunas, ha entrampado la posibilidad de que ellos firmen el acuerdo electoral de la Concertación y que sus candidatos no esperarán más allá del 2 de junio para iniciar sus campañas. En este sentido, explican que de no cedérseles las comunas que piden, en esas localidades los candidatos «correrán por fuera».
«En la Democracia Cristiana saben que si nosotros corremos por fuera, o gana el candidato de la derecha o gana un radical. Por eso no entendemos que la DC se niegue a negociar con nosotros», asegura un diputado de la colectividad.
Sin embargo, en el PS y en el PPD sostienen que los radicales no tienen nada que negociar, pues ellos obtuvieron más comunas de lo que les correspondía proporcionalmente. En este sentido, sostienen que los radicales obtuvieron 43 candidatos a alcalde, mientras que su porcentaje sólo les aseguraba 35 candidaturas.
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