El coordinador de la campaña presidencial y parlamentaria de la UDI dice que el margen que existe entre Lavín y Piñera, de alrededor de seis puntos, sigue vigente a pesar del empate técnico que arrojan las encuestas. Instancia ciudadana del empresario es, a juicio de De la Maza, un buen ejemplo de su reducido nicho de votantes.
A Francisco De la Maza, coordinador de la campaña presidencial y parlamentaria de la UDI, le quedan sólo un par de semanas para dejar su cargo y volver a sus funciones como alcalde de la municipalidad de Las Condes. El edil y estratega de Joaquín Lavín ya ocupó gran parte de los 44 días administrativos que pidió para enfrentar el vendaval político que produjo la entrada de Piñera a la carrera presidencial, una misión que siente que está cumplida: por lo menos, se ha mantenido la brecha que existe entre los dos presidenciables de la Alianza.
Si bien las últimas encuestas (como Time Research e Ipsos) indican que hay un empate técnico entre ambos abanderados, De la Maza insiste que en sus mediciones la diferencia se mantiene entre cinco y seis puntos. La explicación que da es una sola: esos sondeos se realizan vía telefónica, dejando afuera a una proporción importante de los sectores populares que no cuentan con una línea fija. Precisamente, el segmento donde Lavín tiene cifradas sus esperanzas.
Sin embargo, este samurái estima que todavía hay una tremenda meta por cumplir, arrebatarle votos a Michelle Bachelet y lograr el margen necesario para pasar a segunda vuelta. Para ello, todas las estrategias apuntan en un sentido: ganarse el apoyo de las mujeres y de los sectores populares.
-¿Ha cumplido los objetivos que se propuso al momento de asumir el cargo de coordinador de campaña?
-En el momento que asumí este cargo aspiré a coordinar la campaña de la UDI con la campaña presidencial, cosa que ya está coordinada, y que las encuestas se mantuvieran estables, con cinco a seis puntos de diferencia con Piñera. A más de un mes de la aparición de Piñera, creo que es un objetivo cumplido.
"El nicho de Piñera es el ABC1"
-¿Qué potencial de crecimiento tiene la candidatura de Piñera y la de Lavín?
-El electorado de Piñera mayoritariamente está en el ABC1, y este es un grupo con un tamaño bastante chico. El electorado de Lavín, en cambio, es más popular y ese es un segmento en el que puede crecer.
Pero el abanderado de RN dice que su electorado abarca no sólo al ABC1.
-La verdad es que cada uno tiene un nicho bastante específico: Sebastián Piñera ya lo demostró el fin de semana pasado. El lanzamiento del comando ciudadano de Piñera fue lo mismo que haber ido a un cumpleaños en Cachagua, lo que refleja que él tiene un electorado importante, pero que está muy segmentado, muy acotado. Lavín también tiene su propio segmento, que es el mundo popular y, probablemente, Bachelet también tiene su nicho, que es el mundo femenino.
-¿En ese segmento Lavín es superior a Piñera?
-Nosotros tenemos una superioridad evidente respecto a Piñera en un segmento que es difícil de encuestar, que es el D y el E, que no están presentes en las encuestas telefónicas y en el mundo femenino. Eso nos da un margen lo suficientemente estable y sólido para saber que Sebastián Piñera no va a ganar. Estos márgenes son entre cinco a seis puntos de diferencia.
La brecha se mantiene
-¿Cree que este 18 por ciento obtenido por Sebastián Piñera en la encuesta Ipsos es realmente su piso, como él mismo ha afirmado?
-Las encuestas que tenemos nosotros, desde que él apareció en el escenario político, como candidato presidencial, marcan entre 15 y 20 por ciento. Y hasta ahora ha sido una estadística bastante plana, sin evolución. Y las de Lavín marcan entre 20 y 25. Por lo tanto, la diferencia que existe entre ambos se ha mantenido exactamente igual. No ha habido ningún cambio: hasta ahora los dos, sumados, están en el margen para lograr una segunda vuelta. Y nosotros estamos trabajando para obligar a que haya efectivamente una segunda vuelta, aunque todavía falta mucho trabajo.
-¿Cómo pretenden lograr que ese margen de votantes que les falta para pasar a segunda vuelta vaya al molino propio y no al de Sebastián Piñera?
-Yo creo que la distribución de los votos que salen de Bachelet es bastante pareja en términos de porcentaje, por lo que no tengo ese temor (que sean traspasados a Piñera). Hoy día nosotros tenemos que convencer a la gente que efectivamente Bachelet es una candidata débil, ausente, que no tiene un proyecto claro para Chile y, a partir de eso, consolidar una segunda vuelta que hasta ahora no está consolidada. Sí está consolidado un primer, segundo y tercer lugar, pero si la elección fuera hoy día, Michelle Bachelet ganaría en primera vuelta y eso es algo que tenemos que trabajar en los próximos seis meses.
En busca del voto femenino
-¿Esos votos que tienen que atraer provienen del sector de los indecisos?
-No. Hay un porcentaje importante que proviene de los votos que puede perder Michelle Bachelet. No son votos duros, son votos que hoy día marcan una diferencia, pero que en estos seis meses, dada la debilidad que ella tiene desde el punto de vista de programa y de liderazgo, pueden ir emigrando paulatinamente.
-¿Qué características tiene ese grupo?
-Es un grupo importante de gente que hoy día está votando por Bachelet y que el año 99 estaba apoyando a Lavín. Son mujeres que se identifican por género, pero que en algún minuto de esta campaña van a ser un poco más exigentes con respecto a su candidato. Van a exigir más respuestas, más pronunciamiento, más propuestas, más ideas.
Campaña de desprestigio
-Sin embargo, coincidentemente, el entorno de Michelle Bachelet ha acusado la existencia de una campaña de desprestigio en contra de ella y de Ricardo Lagos. ¿Eso forma parte de una estrategia para sustraerle votos?
-Yo creo que no hay una campaña de desprestigio. Creo que el gobierno está haciendo todo lo posible por contaminar denuncias serias, concretas, para analizar e investigar hechos que quieren ser conocidos por el resto del país. Pero sin duda, el hecho de que un cuñado del Presidente tenga contratos millonarios por cinco millones de dólares, y que hermanos y sobrinos de ministros tengan contratos millonarios con el Estado, a mí me parece que es impresentable. Nosotros no podemos permitir que por el sólo hecho de estar en campaña se diga que no se pueden investigar este tipo de situaciones. Lagos no debe olvidarse que hace dos años atrás, con el tema de los sobresueldos, fuimos nosotros los que le dimos una mano para que pudiera salir adelante. Y no estábamos en campaña.
-¿Y en el caso de la relación de su comando con Rómulo Aitken, sí se trata de una campaña de desprestigio?
-Mira, yo no quiero calificar si hubo o no una campaña en ese sentido, pero nosotros estuvimos siempre dispuestos a que se investigara. Y después fue el propio jefe de Investigaciones que dijo que no tenía ningún antecedente respecto de eso.
-¿Cómo se avizoran las próximas semanas?
-Yo creo que los próximos días van a ser bastante más tranquilos. Estamos a la espera de las encuestas que consideremos más importantes y serias, que son la del CEP y Cerc. Y hasta entonces va a estar todo tranquilo.
-Cuando vuelva a tomar las riendas de la municipalidad de las Condes, ¿se va a desligar del comando?
-Voy a seguir colaborando con la campaña. Voy a seguir viniendo a reuniones estratégicas- un par de días a la semana.
Vea además
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