Diputado PPD cree que el caso va a llegar hasta Augusto Pinochet, quien era el comandante en jefe cuando se realizó la exportación de pertrechos, pese a que la ONU había decretado un embargo. Las penas dictadas en este caso »son irrisorias y ridículas. La investigación es insuficiente», acota, al tiempo que pide comparecencia de uniformados ante la comisión de Defensa.
No muy conforme quedó el diputado Antonio Leal (PPD), miembro de la comisión de Defensa de la Cámara baja, con los resultados de la investigación por el tráfico ilegal de armas a Croacia, en 1991, por el que recientemente se dictaron penas que van de los 540 días a cinco años y un día para mandos medios de la época.
Por este motivo, la próxima semana el legislador se entrevistará con la presidenta del Consejo de Defensa del Estado, Clara Szczaranski, para analizar los próximos pasos judiciales, y solicitará al ministro de Defensa, Jaime Ravinet y al comandante en jefe del Ejército, general Juan Emilio Cheyre, una investigación más "exhaustiva de los hechos".
Pero eso no es todo, ya que el parlamentario pedirá que representantes del Ejército concurran a la Comisión de Defensa de la Cámara para explicar todos los aspectos aún no develados de la venta de armas a Croacia, que vulneró el embargo decretado por la ONU en aquella época para evitar la prolongación del conflicto en la zona balcánica.
-¿Por qué cree que la justicia militar no determinó mayores sanciones?
– Cada causa hay que investigarla en sí misma. En el caso de las armas a Croacia, hay serias dificultades puesto que quienes dirigieron las operaciones fueron asesinados y puede que el juez se haya encontrado con problemas para ir más allá. Por eso es muy importante la instancia que viene hoy, que es la Corte Marcial y la Suprema, ya que es allí donde debe intervenir el CDE, porque obviamente este delito va a llegar en algún momento hasta Augusto Pinochet y a los militares que tenían mando con él entre 1989 y 1993. Probablemente el juez militar no ha podido acreditar eso o no se ha atrevido a acreditarlo, y por eso existe la instancia superior que es la Corte Marcial.
-¿Quién debe pedir la intervención del CDE?
– El único que puede pedir la intervención hoy del CDE es el Ministerio Público Militar, que depende del comandante en jefe del Ejército. Por eso, hago un llamado al general Cheyre para que el Ministerio Público Militar solicite la intervención del CDE, y se logre una investigación más a fondo que pueda determinar qué pasó con el coronel Gerardo Huber, quien fue asesinado el 22 de febrero de 1992, en el Cajón del Maipo, y hasta hoy no se sabe quienes son los criminales.
-También está el caso del CNI y ex «gurka» Francisco Zúñiga, quien supuestamente se autoeliminó.
– Eso se debe investigar y saber como el crimen de Huber y de Zuñiga Acevedo están relacionados y qué ocultaron. Se deben determinar, además, las responsabilidades del alto mando, ya que es imposible que se hayan vendido armas de Famae y que la operación haya sido responsabilidad de un par de capitanes. Es poco creíble. Cuando es una empresa donde habían altos oficiales a cargo y que dependía directamente del comandante en jefe, entonces, Pinochet debe responder por estos hechos.
-¿Pinochet, a su juicio, debería ser enjuiciado en este caso?
-Está comprobado que las guías de despacho eran falsas, que las dos empresas que se formaron tenían otro tipo de destinos. La dificultad de la investigación de esta causa es que cuando se detecta la ilegalidad de venta de armas a Croacia aparece muerto el coronel Huber, que participó en este hecho. Ese es un crimen no sólo cometido por los responsables de la venta de armas a Croacia, si no que sólo pudo ser llevado a cabo con la venia del alto mando de las Fuerzas Armadas y particularmente con la de Pinochet para ocultar la venta de armas y quienes estaban involucrados.
-Pero el caso de Huber sigue impune…
-Se debería reabrir la causa y saber quién lo mató.
«Es distinto al caso de Antuco»
-¿No resulta extraña que en una institución tan jerarquizada no haya mandos superiores involucrados en el hecho?
– Aquí hay otro momento. Es muy distinto al caso de Antuco, en que el propio Cheyre ha concurrido a la Cámara y hay intención de investigar. En el caso de las armas a Croacia, Pinochet impedía que el caso se investigara y se actuara con transparencia. En el caso de la venta de armas a Croacia, no tengo duda que está involucrado el alto mando de las Fuerzas Armadas de la época. Es probable que debido a la complejidad de la investigación el fiscal no haya podido acreditar que Pinochet estuvo involucrado.
-¿Por qué cree que no se acreditó?
-Por una razón muy simple, el coronel Huber, que era el que conocía todo esto, fue asesinado, puesto que él era el nexo de las empresas que se constituyeron para vender las armas, los contactos de Famae y el alto mando de las Fuerzas Armadas. Entonces se desarticuló el lazo que existía con la CNI y la comandancia en jefe del Ejército. No es fácil llegar a la verdad en este caso porque al hombre que estaba a cargo de llevar las conversaciones y sabia cuales eran los oficiales involucrados, lo silenciaron.
-Pero sí se puede investigar.
-Es posible investigar y es absurdo pensar que la venta de armas de 7 u 8 millones de dólares sea decisión de un capitán y de un par de suboficiales. Además, las penas son ridículas, irrisorias y la investigación es altamente insuficiente.
-¿Hubo pasaportes falsos en esa operación?
-Sin ninguna duda. Este período coincide con el período en que se utilizaron los documentos falsificados, entre los 80 y los 90, y aquí no hay ninguna duda que los involucrados utilizaron pasaporte falso. El coronel Huber tuvo documentos alternativos y salió del país para realizar negociaciones. Él era una fuente de información extraordinaria y por eso lo mataron.
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