Partidos oficialistas recomiendan a Ejecutivo, y al mismo tiempo se comprometen a colaborar en ello, fortalecer proyectos de ley ligados al desarrollo del país, como mercado de capitales II y la ampliación del Fondo de Garantía a la Pequeña y Mediana Empresa (Fogape). Además, plantean la necesidad de impulsar una agenda social, con especial participación de los movimientos sindicales.
Después de la prolongada protesta de los estudiantes, en Chile quedó la sensación de que cualquier movimiento social bien organizado puede provocar que las autoridades se abran al diálogo y por esa vía lograr la obtención de sus demandas o al menos conseguir que ellas sean escuchadas, lo que abre un horizonte de conflictividad en alza. Es por eso, que los empresarios miran con preocupación este hecho y por lo mismo quieren impulsar una ofensiva en pro de una Agenda Pro-Crecimiento III, donde principalmente se analicen temas como la flexibilidad laboral y nuevas regulaciones en el área medioambiental, de modo de evitar sorpresas en este ámbito.
Lo cierto es que esto no cayó nada de bien en la Concertación y fue objeto de análisis, tanto en la tradicional reunión de los lunes de los presidentes de los partidos, como también cuando los máximos dirigentes se entrevistaron con el comité político de la Moneda, encabezado por el ministro del Interior, Andrés Zaldívar.
En la segunda cita, según fuentes confiables, los timoneles del Partido Socialista (PS), Camilo Escalona; del Partido Por la Democracia (PPD), Sergio Bitar y del Partido Radical Social Demócrata (PRSD), José Antonio Gómez y el vicepresidente de la Democracia Cristiana, Jorge Burgos, expresaron sus aprensiones respecto a lo qué quieren los empresarios.
En la oportunidad, el ministro Zaldívar explicó la conversación que tuvo con el presidente de la Sofofa, Bruno Fillipi, dejando en claro que los empresarios «no tienen ningua agenda armada, pero si el interés de abrir un diálogo con el gobierno para analizar diversos temas». Ante eso, los jefes partidarios señalaron que es bueno discutir los distintos tópicos de carácter económico, pero que ello no signifique dejar afuera de la orden del día las urgencias sociales.
En ese orden, los líderes concertacionistas coincidieron en que es necesario que el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet mantenga un fuerte liderazgo en la conducción económica del país, enriqueciendo un conjunto de proyectos de ley que se encuentra en el Parlamento «para materializar una nueva etapa de desarrollo», pero, al mismo tiempo, abriendo un diálogo social que incluya a todos los sectores, en especial, a los trabajadores y los pequeños y medianos empresarios.
Respecto a los proyectos de ley que se recomienda potenciar se encuentran las iniciativas relacionadas con el paquete denominado mercado de capitales II, el cual incluye la noción de responsabilidad fiscal, la ampliación del Fondo de Garantía de la Pequeña y Mediana Empresa (Fogape), una revisión a los impuestos de timbres y estampillas, simplificación tributaria para las pequeñas compañías y el empleo de lo recaudado con el royalty a la actividad minera, cuyos recursos estarán destinados a ciencia y tecnologías.
Lo anterior significa -según dijo la misma fuente- que no habría ánimo para «entrar en el juego de los empresarios y dejar que ellos lideren una agenda que le corresponde al gobierno reimpulsar. No nos cerramos a debatir, pero queremos -en esta nueva etapa- impulsar una agenda social o abrir un diálogo, donde todos los sectores, como empleados, empleadores, partidos y parlamentarios, hagan sus propuestas».
PS pide a La Moneda abrir el diálogo para crear pacto social
Uno de los que dejó muy en claro que es indispensable abrir un diálogo social, durante la reunión con el comité político de La Moneda, fue el senador y presidente del PS, Camilo Escalona. "Hay un conjunto de materias relativas con una agenda de crecimiento que tiene el gobierno y eventualmente se puede enriquecer y potenciar, pero consideramos que ésta es una muy buena oportunidad para instalar la idea del diálogo social".
"En estas materias, tanto las sociales como las económicas, todos somos actores y el rol del Parlamento no debe de ninguna manera excluir sino que presupone también que las organizaciones sociales de los trabajadores y los empresarios puedan emitir sus opiniones", manifestó.
Y agregó: "Desde 1990 hasta la fecha somos una fuerza comprometida con el crecimiento económico. Eso permite mantener el nivel de gasto social y, eventualmente, ampliarlo. La gran tarea que ha realizado la Concertación ha sido que esa expansión, que se refleja en un mayor ingreso fiscal, ha sido con el afán de aumentar el gasto social".
"Siempre hemos vinculado ambas cosas. Entonces, bienvenida la posibilidad de conversar. Eso sí, hemos sacado como lección los años 2002 y 2003 que tiene que haber un diálogo social con todos los sectores, porque de otra manera no se puede", añadió.
Comisión Económica y Social DC cuestiona protagonismo de empresarios
Este lunes, en la sede del Senado en Santiago, se constituyó, por su parte, por primera vez, bajo la conducción de la mesa directiva de Soledad Alvear, la comisión económica y social de la Democracia Cristiana, que se creó durante la gestión del ex timonel, Adolfo Zaldívar. La instancia, que tiene un carácter más técnico que político, está constituida por más de 20 miembros de las diversas tendencias de la falange, como por ejemplo, Juan Villarzú (alvearista), el senador Hosain Sabag (colorín) y el ex ministro Andrés Palma (chascón), siendo presidida por el economista Ricardo Ffrench-Davis, quien tiene un perfil más técnico pero que ha llamado insistentemente a cambiar el modelo económico en vigencia.
Durante las dos horas de sesión, los demócratas cristianos analizaron la propuesta de los empresarios y expresaron sus reparos, en especial, con respecto al tema de la flexibilidad laboral. Uno de los asistentes expresó en «off» que "es inaceptable que la Sofofa quiera reinstalar una agenda de crecimiento III y que, al mismo tiempo, pretenda liderar un conjunto de materias solo para potenciar sus intereses. Es indispensable que los trabajadores y los pequeños y medianos empresarios entren a este debate".
Para eso se ratificó la urgencia de fortalecer una agenda pro-equidad, donde los actores sociales tengan un papel preponderante, como se hace actualmente en varios países de Europa como en Holanda. Luego de la cita, la presidenta de la DC dijo que "nuestro partido trabajará en una agenda pro-equidad, pues este es el mandato de los ciudadanos en las recientes elecciones presidenciales".
"Este es nuestro deber ético ineludible y este es el significado que los chilenos le dieron a la demanda de un nuevo y no cuarto gobierno de la Concertación, por ello ésta deberá ser la gran tarea de la DC", manifestó la senadora.
PPD se reunirá con dirigentes de la CPC y la CUT
El presidente del PPD, Sergio Bitar, expresó, por su parte, que "para nosotros es fundamental que la Concertación mantenga el liderazgo, como lo ha hecho, en la mejor conducción económica que ha tenido Chile en su historia. El gobierno y nosotros vamos a mantener esa línea y también creemos indispensable resaltar más el conjunto de iniciativas que se lleva en el Parlamento, ligadas al desarrollo del país".
"Entonces, no solo queremos potenciar los proyectos sobre crecimiento que ya existen, sino que ir articulando, en la nueva etapa que vivimos, con empleadores y trabajadores. Y en ese sentido tenemos que hacer un esfuerzo mayor porque en la fase nueva en la que Chile está entrando, de desarrollo más rápido, la convergencia de los acuerdos entre empleados y empresas es fundamental para apurar los pasos y no generar conflictos innecesarios", dijo.
A su parecer es indispensable que se instaure en Chile "un diálogo social, el cual en otras ocasiones se inició en nuestro país pero no ha fructificado como quisiéramos y no debe ser una materia que quede limitada a dos sectores, sino que tiene que incorporarse el Estado. Así han funcionado los países desarrollados", añadió Bitar.
Por eso, la directiva del ex ministro de Educación tiene contemplada para este martes una reunión con la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) y el jueves con la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) para informar que la colectividad quiere lanzar una agenda de diálogo social.
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