Publicidad

«Evelyn Matthei no fue transparente, sincera ni deferente»

Mirko Macari
Por : Mirko Macari Asesor Editorial El Mostrador
Ver Más

Si algo le dolió a esta periodista que aspiraba a representar a la UDI, por segunda vez, como candidata a diputada en el distrito 8 -Coquimbo, Ovalle y Río Hurtado-, fue enterarse por la prensa de que no había sido nominada. Hasta hoy no ha recibido ni un llamado telefónico de los máximos dirigentes gremialistas, pese a que renunció al partido el pasado viernes 6 de febrero, a través de una declaración pública.


Aunque los máximos dirigentes de la UDI aún no se han dado por aludidos, la nominación de los candidatos para las elecciones parlamentarias de diciembre ya está dejando heridos. Y es difícil especular acerca de las consecuencias. La precandidata por el distrito 8 de Ovalle, en la Cuarta Región, Ana Victoria Durruty, tomó la firme determinación de renunciar a la UDI luego de enterarse, por la prensa, la semana pasada, que no será candidata a diputada y que la elegida fue su contrincante al interior del partido, la presidenta del gremialismo en Ovalle y médico pediatra, Susana Verdugo.

Ana Victoria está tan decepcionada de la tienda que la acogiera desde el año 2001, cuando postuló por primera vez a la Cámara de Diputados por Ovalle, que no descarta intentar cumplir su aspiración como independiente. Dice que apoyo para eso tiene, lo que es altamente probable considerando que ha sido la candidata de la derecha que más votación ha sacado en el distrito, tal como ella no duda en recordarlo. Zona donde desde 1993 la Concertación mantiene un doblaje que ha resultado imposible romper. En su incursión, la Durruty obtuvo un 21,30 por ciento, incluso más que el único diputado que la Alianza ha logrado poner en esa zona y por un único periodo, el RN Jorge Morales, que en 1989 sacó un 17,79 por ciento.

Eso sí, Durruty no se va de la UDI en silencio. Sino con duras críticas al partido y en particular a importantes figuras gremialistas como Evelyn Matthei y José Antonio Kast. De la primera acusa, entre otras cosas, que su «estilo» le ha significado a las UDI la permanente baja electoral en la Cuarta Región. Del segundo, a quien apoyó en las primeras elecciones internas del partido en Julio, sostiene que se dio cuenta que se equivocó al darle su respaldo.

– ¿Antes de anunciar su renuncia a la UDI usted se contactó con algún dirigente para confirmar si es que efectivamente se descartó su nombre como candidata a diputada por el distrito 8?

-Tras las llamadas de las dos periodistas locales que me informaron el anuncio hecho por la senadora Evelyn Matthei la tarde del jueves, quedé a la espera de la llamada de ella o de alguien de la comisión. El viernes en la mañana los diarios locales recogían la información, y además, que la candidata nominada sí había recibido la confirmación de Matthei. Esa actitud, fue la «guinda de la torta», como explico en la declaración.

-¿Habló con algún dirigente el fin de semana?

-Hablé con mucha gente que me llamó para apoyarme, incluyendo dirigentes de base de la UDI. Ningún dirigente nacional ni la senadora me llamaron el fin de semana.

– ¿Pretende reunirse con algún integrante de la directiva?

-Me encantaría que alguno me invitara, pues tengo muchos hechos que informarles.

– ¿Qué es lo tendría que informar?

-Cosas en relación con todo lo que ocurre en el distrito, pero no quiero hablar de eso, porque lo responsable es que primero se lo informe a ellos.

– En su renuncia, usted fue particularmente crítica con la senadora Evelyn Matthei ¿Se siente traicionada por no haber recibido su apoyo?

-No sólo por eso, sino porque no fue transparente, sincera ni deferente.

– ¿A qué se refiere cuando dice que el «estilo» de hacer política de la senadora explica el deterioro electoral del partido en la Cuarta Región?

-Me refiero al mismo estilo que el presidente regional calificó de «peculiar» y que llevó a la renuncia al anterior presidente regional, Floridor Pinto, un dirigente histórico y ex candidato a diputado también. Un estilo que no valora el aporte realizado en el tiempo por las personas y que no se caracteriza por un trato amable. Un estilo desvinculado del sentir de los dirigentes de base. Los resultados electorales de las últimas municipales hablan por sí solos. En definitiva, en la región en que ella es senadora UDI, no hay ni un diputado UDI, ni un solo alcalde UDI, y hay sólo un concejal UDI en la mitad de las comunas.

– ¿Hasta ahora cómo fue su relación con la senadora Matthei?

-Muy buena.

«Kast me ha decepcionado»

– ¿Se siente decepcionada del camino que ha tomado la UDI estos últimos años?

-Ahora entiendo aún mejor la decisión de Luis Cordero, uno de los fundadores de la UDI, de renunciar a la colectividad. También comprendo mejor el alejamiento de la política de Marco Antonio González, ex director de la Fundación Jaime Guzmán.

– En las pasadas internas del partido usted se inclinó por José Antonio Kast ¿Siente que la situación que la afecta le da la razón?

-Siento que no debí apoyar al diputado Kast. Me ha decepcionado.

– ¿Por qué?

– Por la actuación que tuvo en el tema de la selección de los candidatos. En noviembre me enteré por el diario de que Susana Verdugo estaba en la lista de candidatos que apoyaba José Antonio. Lo llamé por teléfono para preguntarle por qué apoyaba a alguien que no conocía y no a mí. Él respondió que desconocía que yo estuviera interesada en ser candidata en el distrito 8 y me propuso que cuando volviera del viaje que estaba por iniciar, nos juntáramos a tomar un café para hablar el tema. Nunca más me respondió el celular ni contestó mis mails. En enero nos encontramos en una actividad de la Fundación Guzmán con jóvenes y ahí conversamos y yo le conté lo que estaba haciendo en el distrito. Él planteó que el distrito 8 se iba a tener que resolver por encuestas, cosa que tampoco se hizo.

– ¿Diría que la UDI ha perdido su norte, electoralmente hablando?

– Es cosa de observar el panorama presidencial.

– ¿Qué provocó su renuncia al partido entre quienes la apoyan? ¿Se podría producir un efecto dominó en la región?

– Entre quienes me apoyan, que no son sólo del partido, pues soy muy transversal, me han expresado mayoritariamente su voluntad de que vaya como candidata independiente. Eso se puede corroborar con el grupo «Durruty Diputada 2009» en Facebook y en los comentarios a mi estado en mi perfil personal.

– ¿Pretende seguir participando en política?

– Estoy en un período de reflexión hasta el 6 de mayo.

– ¿Qué tan sólida era su plataforma de apoyo para aspirar a una diputación?

– Soy el candidato de la Alianza por Chile, más votado desde el año 1989 en adelante. Tuve 20.722 votos y rompí el doblaje en Coquimbo. La gran mayoría de los dirigentes locales – más de 20 en Ovalle y Coquimbo-  apoyaron mi candidatura, incluyendo los dos vicepresidente distritales (la presidenta era la otra candidata), los dos consejeros nacionales de la UDI de la región, el presidente comunal de Coquimbo (la presidenta comunal de Ovalle es la misma candidata), ex concejales, ex candidatos, etc. Estuve trabajando en terreno tres meses y ya tenía una red sólida de apoyo en distintos estamentos y en poblaciones. Era la precandidata con más apariciones en la prensa local y con casi el doble de adherentes en el grupo de Facebook que mi contendora.

-¿Estaría efectivamente dispuesta a levantar una candidatura independiente?

-Tengo que evaluar muy bien todas las implicancias de una candidatura independiente. Pero, no sé si podré negarme ante el ímpetu y entusiasmo de tanta gente, que ha quedado profundamente decepcionada con el anuncio de que no iré en el cupo de la UDI.

 

Publicidad

Tendencias