Publicidad

“Las declaraciones del subsecretario de Educación me parecen una vergüenza”

El mismo día en que Juan Carlos Cabezas le cobró una boleta de garantía a Compass Group por US$ 1,5 millones, debido a que en sus bodegas habían fecas y orines de ratón en los alimentos que se entregan a los niños de Arica, el subsecretario de Educación Francisco Rojas, le pidió la renuncia. Después que El Mostrador informara del hecho, el secretario de Estado indicó que la salida de funcionario se debió a problemas de desempeño, pese a que la Junaeb se había ganado el premio a la gestión. Cabezas da su versión de los hechos.


Cuando el tiempo, el espacio y la forma construyen un hecho perfecto, suele decirse que hay coincidencia. Y en la petición de renuncia que el subsecretario de Educación Fernando Rojas le cursó el pasado 15 de septiembre al director de la Junaeb, Juan Carlos Cabezas, la norma se cumple a cabalidad; porque el mismo día, cuando Cabezas aplicó una multa de US$ 1,5 millones a la empresa Compass Group, debido a que se le encontraron fecas de ratón en la bodega donde se guardaban los alimentos que consumen los niños mas desposeídos de Arica, le fue informado que sus servicios ya no eran requeridos.

– ¿Cómo se enteró se que en las bodegas de la empresa Compass Group habían fecas de ratón y alimentos en mal estado?

– A través de un diputado de la región. Así que instruí de inmediato una auditoría con nuestros propios funcionarios, para saber cómo se había portado la empresa en la región. Le pedimos ayuda a la Seremi de Salud y los resultados fueron desastrosos. Fecas de ratón, orines de ratón, alimentos vencidos, palomas. En fin, un sinnúmero de irregularidades. Esto no era un problema menor. Potencialmente podía haber una intoxicación.

“Había denuncias anteriores”

– ¿Y fue muy difícil aplicar esta multa cobrando la boleta de garantía por US$ 1,5 millones?

– Cuando llegué a la Junaeb hace dos años, me encontré con que el contrato con esta empresa ya estaba armado. Entonces comenzamos a hacer cambios graduales e importantes en el proceso, porque estos contratos tenían un problema grande. Por ejemplo, las multas de antes, podían ser iguales tanto si un plato estaba en mal estado o si faltaban cubiertos en la mesa o si se hallaban fecas de ratón, porque todo era de una alta complejidad. Entonces, instalamos un sistema informático para tener la información más rápido a nivel nacional. Y yo me hice cargo personalmente de las multas para cursarlas. Yo mismo las informaba al gerente o al dueño de la empresa que hubiera cometido una falta.

[cita]No me llamaron para presionarme, sino que el subsecretario me llamó para decirme que se me pedía la renuncia. Yo no hago la asociación entre una cosa y otra, prefiero no mezclar mi renuncia y la multa a esta empresa. Lo que si hay es un desafortunado evento.[/cita]

– ¿Era el primer problema de esta empresa?

– No, ya habían otras denuncias anteriores. Se habían hallado pelos, alimentos en mal estado.

– ¿Pero esto es distinto, más grave?

– Claro, se excedía absolutamente. Por eso, lo que se hizo fue un esfuerzo importante. No sólo por aplicar el máximo rigor de las multas, sino que hicimos efectiva la boleta en garantía, de US$ 1,5 millones y tratamos de caducar el contrato de la empresa en la región.

“El subsecretario se equivocó rotundamente”

– El 14 de septiembre usted informó a las subsecretarías de Salud y Educación de que en las bodegas habían fecas de ratos y alimentos en mal estado. Una vez que fue conocido este tema por las autoridades, ¿lo llamaron para presionarlo y que no aplicara sanciones?

– No me llamaron para presionarme, sino que el subsecretario me llamó para decirme que se me pedía la renuncia. Yo no hago la asociación entre una cosa y otra, prefiero no mezclar mi renuncia y la multa a esta empresa. Lo que si hay es un desafortunado evento.

– Pero la coincidencia es demasiado grande ¿no le parece?

– Habría preferido que no hubiera tanta coincidencia entre la multa a la empresa y mi petición de renuncia.

[cita]Cuando llegué a la Junaeb me encontré con que el contrato con esta empresa ya estaba armado y tenía un problema grande. Las multas podían ser iguales tanto si un plato estaba en mal estado o si se hallaban fecas de ratón. Me hice cargo personalmente de las multas para cursarlas.[/cita]

– El subsecretario de Educación dijo la semana pasada que la petición de renuncia se produjo por una mala evaluación de su gestión, apuntando a los casos de los computadores de palo y leche que no cumplía con las normas para dárselas a los niños.

– Me parece un acto mucho, mucho más desafortunado el hecho se apuntar a una deficiencia en la gestión para terminar mi contrato. Nosotros entregamos 60 mil computadores y dos eran de palo y los hechos se denunciaron al Ministerio Público y se solucionaron. Esto le podría pasar también a Falabella, pero no por eso el gerente es el responsable. Lo que si es cierto, es que cumplimos al 100 por ciento las metas. De hecho, nos ganamos el premio a la gestión. Por primera vez en la historia de la Junaeb quedamos dentro de las tres instituciones mejor evaluadas a nivel nacional. Y fue en este gobierno, no en los anteriores. Contratamos a personas que llevaban 20 años a honorarios, entre muchas otras mejoras de los programas dirigidos a los niños. Cuando alguien me dice que eso es falta de competencia, entonces no se de qué estamos hablando.

– ¿El subsecretario faltó a la verdad?

– Se equivocó rotundamente, sus declaraciones me parecen inaceptables, una vergüenza. Los hechos y la evidencia demuestran que aquí no hay una mala gestión. Eso es claro y categórico. Este gobierno me entrega a mí, como Junaeb, el premio a la excelencia. Por eso, cuando se hacen declaraciones hay que hacerlas con elementos reales y no con ira. Lo importante es que el cobro de la boleta en garantía a la empresa, es un precedente para el futuro.

“Compass Group ha sido muy negligente”

– ¿Cuál fue la reacción de la empresa cuando le cursó la multa y el cobro de la boleta en garantía?

– En general la empresa ha sido muy negligente en la región. Consideraban que la multa era un exceso. Ellos quisieron reunirse conmigo, pero no los recibí, porque aquí no se trata de la plata, sino de la magnitud del daño que se podía provocar con los alimentos que van a los niños de menores recursos. Eso es absolutamente inaceptable. Hicimos un esfuerzo desde el punto de vista legal y aplicamos todo el rigor.

[cita]La empresa dijo que si aplicábamos la multa ellos podían dejar de prestar servicios al Estado y con ello habría un gran desabastecimiento, lo que provocaría que los niños no tuvieran alimentos.[/cita]

– ¿Cuál fue el argumento de la empresa?

– Dijeron que si aplicábamos la multa ellos podían dejar de prestar servicios al Estado y con ello habría un gran desabastecimiento, lo que provocaría que los niños no tuvieran alimentos. Pero si eso llegaba a suceder, yo como Junaeb tenía toda la capacidad para solucionarlo en el acto. Porque después del terremoto con todos los problemas que hubo, llegamos a zonas que ni siquiera aparecían en los mapas a entregar alimentación.

– ¿Sabe usted si la empresa se reunió con las autoridades de Educación para tratar de revocar la decisión?

– No tengo información al respecto, pero el cobro de la multa, como el cobro de la boleta de garantía son irrevocables. Lo que importa aquí es que si en otra oportunidad se detecta un caso similar, donde existan fecas de ratón o anomalías similares, como ocurrió en la Cenabast, se apliquen las mismas sanciones, con todo el rigor y la misma magnitud, a las empresas que cometan estas irregularidades.

– El 21 de septiembre usted envió un oficio a la subsecretaria de Salud, Liliana Jadue, señalándole que no estaba de acuerdo con las conclusiones a las que arribó la Seremi de Arica, en torno a que las fecas de ratón encontradas en los alimentos, no constituían un peligro para la salud de los niños.

– Efectivamente fue así. Me pareció que había un poco de laxitud en las conclusiones, respecto a la prontitud con que se investigó.

– ¿Habían sucedido hechos similares en otras regiones, a los ocurridos en Arica?

– No. Nunca antes. Nunca me había tocado ver un espectáculo de esta magnitud. Si hubiéramos tenido más facultades, las sanciones habían sido mayores.

– ¿Se va dolido con las nuevas autoridades?

– Con las declaraciones del subsecretario; también con que nos hayan bajado de la ceremonia del premio a la gestión a última hora, porque eso es un insulto a las personas que después del terremoto se trasladaron, incluso durmiendo en carpa para controlar y entregar la alimentación a las personas afectadas. Esto es un insulto a ellos.


Publicidad

Tendencias