El jurista explicó así que las denuncias que se han realizado en contra del sacerdote no hayan prosperado. “Otras personas lo denuncian hace años ante la iglesia y esto no llega a ningún lado porque tiene un manto de protección», dijo y agregó que a nadie le conviene que “se investigue a medias”.
La recomendación de la fiscal judicial María Loreto Gutiérrez de reabrir la causa por abuso sexual en contra del sacerdote Fernando Karadima mantiene con las últimas esperanzas a los abogados querellantes en este caso.
Juan Pablo Hermosilla está a la espera de que la Corte de Apelaciones reabra la causa y según indicó en declaraciones a Radio Cooperativa, a ninguna de las partes les conviene que “se investigue a medias”.
«El señor Karadima está sosteniendo que es inocente. Si sostiene que es inocente, la mejor forma de reforzar su posición es investigando hasta el fondo», dijo en la emisora.
El abogado sumó también las razones que, según él, han impedido que las denuncias en contra del párroco de El Bosque, tuvieran otro final: «Tiene una máquina de poder que resiste todos estos años, ya que otras personas lo denuncian hace años atrás ante la iglesia y esto no llega a ningún lado porque tiene un manto de protección…Para que todo esto haya podido subsistir tanto tiempo se requiere que alguien generará la impunidad y ocultara estas cosas», dijo.
La fiscal judicial recomendó la reapertura de la causa y solicitó activar 14 diligencias y una serie de interrogatorios, acceso a la causa eclesiástica que lleva adelante El Vaticano y un peritaje psiquiátrico al párroco. La semana pasada Gutiérrez también sugirió realizar careos entre el sacerdote y cuatro de sus denunciantes: James Hamilton, Fernando Batlle, Juan Carlos Cruz y José Murillo.
