La decisión de la jueza -de sobreseer la investigación en contra de un religioso franciscano imputado de presuntos abusos sexuales contra menores de edad en un colegio de La Florida- desencadenó la molestia por parte de los familiares y amigos de las víctimas.
Un violento altercado se generó este miércoles en el edificio que alberga a los Juzgados de Garantía de calle Huérfanos, luego de la decisión de la jueza Karen Atala de sobreseer la investigación en contra de un religioso franciscano imputado de presuntos abusos sexuales contra menores de edad en un colegio de La Florida.
La decisión desencadenó la molestia por parte de los familiares y amigos de las víctimas, quienes ingresaron gritando a la sala de audiencias del tribunal, donde lanzaron panfletos pidiendo la revocación del fallo.
Luego, cuando la jueza Atala se disponía a salir de la sala, fue encarada por la madre de uno de los pequeños. En medio de la discusión la magistrado le habría lanzado un vaso con café a la mujer, según denunció la propia afectada.
Durante la audiencia el Ministerio Público solicitó la suspensión condicional del procedimiento, lo cual fue acogido por la jueza, decretando el cierre de las indagatorias y además la prohibición de informar respecto del nombre del religioso.
