«La educación es un derecho, no un negocio. Esta sencilla enunciación es la que ha fundamentado las protestas de estudiantes secundarios y universitarios contra el sistema educativo chileno», postuló la APDH al solidarizarse con el estudiantado.
La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Argentina (APDH) repudió este miércoles la «brutal e «ilegítima represión a los estudiantes» chilenos, que reclaman una educación pública, gratuita y de calidad.
El Presidente Sebastián Piñera y su administración «se encuentran en las antípodas del criterio de los estudiantes, con políticas y prácticas que son lastre de la dictadura» de Augusto Pinochet (1973-1990), opinó la organización humanitaria en un comunicado.
El gobierno chileno «utiliza más de la mitad del presupuesto educativo en subvencionar la educación privada» y «los estudiantes secundarios y universitarios tienen derecho a pedir a sus autoridades y a que se escuchen sus reclamos», añadió.
«La educación es un derecho, no un negocio. Esta sencilla enunciación es la que ha fundamentado las protestas de estudiantes secundarios y universitarios contra el sistema educativo chileno», postuló la APDH al solidarizarse con el estudiantado.
Más de 100.000 personas se manifestaron este martes en varias ciudades, incluyendo Santiago donde grupos de encapuchados protagonizaron disturbios, en una nueva jornada de paro convocada por estudiantes que demandan desde hace casi tres meses una mejor educación pública.
La Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) se movilizó el martes en Buenos Aires en solidaridad con los estudiantes de la nación vecina.
El Ejecutivo prohibió dos manifestaciones convocadas el pasado jueves, pero ese día los estudiantes desafiaron la restricción y la policía los reprimió. Tras una violenta jornada, hubo 874 detenidos en todo el país.
