Según la legisladora opositora, la medida «atropella los derechos de la comunidad de Freirina».
La senadora del PS Isabel Allende se refirió a la autorización para que la planta de cerdos de Agrosuper en Freirira reanude sus operaciones calficándola como «poco transparente como ha sido todo el proceso, sin consulta, sin dialogo con la comunidad. Una vez más el gobierno demuestra que está velando por los intereses de la empresa antes que los de la comunidad de Freirina, atropellando sus derechos. Es un traje a la medida de Agrosuper».
Sobre el contenido de la resolución, la parlamentaria opositora sostuvo que «llama la atención que solo con una visita de inspección, como señala la Seremi de Salud en su resolución, se constató que las deficiencias detectadas ya no están presentes y se puede volver a operar. Caben muchas dudas del celo de estas inspecciones cuando estas mismas, por ejemplo, en enero de este año sostenían que no habían problemas sanitarios ni malos olores en la operación de la planta y en marzo se desató la crisis, entonces es poco confiable su criterio»
Agregando que «en la resolución nada se dice del traslado de los cerdos y el manejo de sus residuos, como lo señaló un estudio de una consultora internacional encargado por la Comisión de Evaluación Ambiental»
Finalmente, recalcó que «acá el gobierno ha faltado a la verdad con la comunidad de Freirina, ha actuado del lado de la empresa, sin comunicar sus decisiones a los afectados quienes se enteran por la prensa de sus resoluciones. La comunidad con justa razón desconfía porque no se respetan sus derechos y se les ignora»
