El jefe de Estado llegó hasta el ex Congreso Nacional para entregar, junto a su esposa, Cecilia Morel, sus condolencias por el deceso del embajador y ex senador.
Unos 15 minutos estuvo el Presidente de la República, Sebsatián Piñera Echeñique, con la familia del fallecido embajador de Chile en Argentina y ex senador Adolfo Zaldívar Larraín, expresándole las condolencias a su viuda, Alicia Larraín, quien ha permanecido en la sede del ex Congreso Nacional en Santiago desde que llegaron los restos de su esposo para ser velados.
Piñera, vestido de riguroso negro llegó acompañado de su señora, Cecilia Morel, y tras compartir con la familia destacó la “tremenda trayectoria de servicio público de Zaldívar, asegurando que lamentaba “desde el fondo del alma (su muerte) que es una pérdida importante para Chile”.
El mandatario dijo que conocía al fallecido embajador desde la juventud, cuando compartieron en la Universidad Católica y varios años después en el Senado, y agradeció en nombre propio y del gobierno el servicio prestado por Adolfo Zaldívar a Chile.
Piñera recalcó que el político fue “siempre un hombre que luchaba por las causas en las que creía. (…) Su enseñanza nos va a inspirar”.
El jefe de Estado subrayó que el aporte de Zaldívar como embajador de Chile en Argentina y en los temas de la integración con ese país fue “muy significativo”, haciendo con ello “una enorme contribución a profundizar y proyectar las relaciones con Argentina”.
Y coincidiendo con otros dirigentes políticos que le precedieron, Piñera destacó que Zaldívar “siempre fue muy valiente y muy consecuente”.
Mientras tanto, el ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Larroulet, quien llegó junto al Presidente y la Primera Dama hasta la sede del Congreso, describió a Adolfo Zaldívar como “una persona con un compromiso notable por el país, que enalteció la política”, y al igual que Piñera, destacó el interés del fallecido embajador por la integración entre Chile y Argentina.
