El sociólogo cree que el ex minitro de Desarrollo Social representa «un liderazgo que ya ha sufrido su desgaste, son muchos años en los cuales tampoco se ha reinventado», mientras que el ex titular de Cultura suma al abanderado de RN «un carisma diferente, más juvenil, más de centro, ligado al mundo de la cultura».
EL sociólogo Eugenio Tironi hizo un análisis del momento por el que atraviesan por estos días las campañas de los candidatos presidenciales del oficialismo, Pablo Longueira de la UDI y Andrés Allamand de RN, tras la incorporación a sus comandos de los ahora ex ministros de Desarrollo Social, Joaquín Lavín, y de Cultura, Luciano Cruz Coke, respectivamente.
En una entrevista publicada este lunes por el diario Pulso, el otrora jefe de la campaña presidencial de Eduardo Frei Ruiz-Tagle considera que el despliegue de Longueira iba a tener un mayor impacto y que el abanderado de Renovación Nacional ha sabido resistir bien, manteniendo intactas sus posibilidades de imponerse en la primaria del 30 de junio.
Al respecto indicó que a diferencia de la oposición, donde cree que no habrá sorpresas y donde «la incógnita es quien sale segundo y por cuánto gana (Michelle) Bachelet», en el oficialismo «está mucho más abierto el panorama».
«Yo suponía que Longueira tenía mucha chance, pero esto de que tenga que sacar a Lavín y ponerlo en la campaña significa que las cosas no andaban tan bien», sostiene Tironi.
Lo anterior, argumenta, porque considera que el ex alcalde de Santiago representa «un liderazgo que ya ha sufrido su desgaste, son muchos años en los cuales tampoco se ha reinventado, y además, no suma algo a Longueira, porque son dos políticos, mientras que Cruz-Coke le suma a un político como Allamand un carisma diferente, más juvenil, más de centro, ligado al mundo de la cultura».
Y agregó que «yo creía uqe Longueira iba a tener una entrada más espectacular de la que tuvo, todavía está curando las heridas en la UDI, esta manera autoritaria de instaurar la plantilla parlamentaria ha tenido sus costos. Allamand resisitió bien la entrada de Longueira, hizo los ajustes, y tal cual veo hoy las cosas yo apostaría más por Allamand que por Longueira».
