También critica las candidaturas de Bachelet y Matthei
“Las dos coaliciones han estado en el Gobierno, hemos tenido Presidente hombre y Presidenta mujer. Las dos coaliciones han sido indolentes, por ejemplo, de los 12 mil niños que hoy están en el Sename son víctimas de muchos errores”, señala la ex conductora de televisión.
La ex rostro de TVN y esposa del abanderado presidencial Marco Enríquez-Ominami, Karen Doggenweiler, critica duramente las candidaturas de Michelle Bachelet y Evelyn Matthei, afirmando que ambas representan al “pasado” y fustiga a las dos coaliciones porque han sido “indolentes” sobre distintos temas que son importantes para la ciudadanía.
La saliente conductora del “Buenos Días a Todos” hace un análisis de lo que será la campaña presidencial, indicando que en esta oportunidad será distinta a la pasada, ya que en la anterior “el poder político estaba representado por el candidato de la Concertación y el poder económico por el actual Presidente y la Alianza”.
Agrega en entrevista a El Mercurio que en la carrera actual a La Moneda son más candidatos y “evidentemente es una campaña diferente. Mientras no tengamos una educación gratuita y de calidad, mientras no tengamos una educación gratuita y de calidad, mientras no tengamos pensiones dignas, mientras no tengamos viviendas dignas para todo Chile, la candidatura de Marco es fundamental”.
Además, estima que en el país se necesitan discutir temas “urgentemente” y añade que las candidaturas de Matthei y Bachelet no sólo se trata de género, ya que “las dos coaliciones han estado en el Gobierno, hemos tenido Presidente hombre y Presidenta mujer. Las dos coaliciones han sido indolentes, por ejemplo, de los 12 mil niños que hoy están en el Sename son víctimas de muchos errores”.
Y explica que la campaña no tiene que ver con sexos, sino con una “mirada del pasado y del futuro. Marco representa el futuro y evidentemente las dos candidatas del duopolio representan el pasado”.
Respecto a lo encumbrada que se encuentra Bachelet en las encuestas y las ventajas de MEO frente a la abanderada de la Nueva Mayoría, Doggenweiler estima que la “candidatura de Marco es abrir la mente, cambiar el lenguaje. Esa es la diferencia de Marco, ese es su gran potencial, es cambiar las reglas. Un joven en otro país tiene muchas posibilidades de tomar decisiones de lo que pasa en su país que un joven chileno; decidir a través de un plebiscito la Constitución que quiere, que elija a sus intendentes. Todo lo que está pasando hoy en día tiene mucho que ver con eso y no solo con la economía. Tiene mucho que ver con la política”.
Menciona que el énfasis de la campaña de MEO es la cambiar las reglas y correr los límites, ya que “no solo es importante pasar a segunda vuelta, sino también que sea el siguiente Presidente de Chile. La discusión esta vez es entre pasado y futuro. Marco representa el futuro entre el statu quo, el establishment y la innovación, la renovación”.
Sobre su función en la campaña de Marco, la periodista señala que será los ojos “donde él no pueda estar, voy a ser su primera consejera. Voy a marcar los énfasis en los puntos que a mí me interesan y en los que yo tengo un compromiso”.
Además, indica en el supuesto que su marido gane en noviembre será una primera dama atípica, “distinta a lo que hemos visto. Yo, un poco en broma, en la campaña pasada, decía “voy a cerrar la oficina de la Primera Dama en La Moneda”, pero evidentemente tiene que ver con el gesto de estar en terreno. Ese dinamismo, esas ansias de estar en terreno, de estar con la gente, acompañando las distintas realidades, buscando soluciones, ofreciendo ayuda y propuestas, es lo que a mí me motiva”.
