A juicio del director ejecutivo de la entidad, Alex Muñoz, el Ejecutivo «está resguardando los intereses corporativos de Endesa y las empresas mineras en vez de conducir una política energética verdaderamente orientada al bien común».
La organización internacional de conservación marina Oceana criticó al Gobierno por «defender» a la termoeléctrica Punta Alcalde de Endesa, luego que la Corte de Apelaciones de Santiago acogiera tres recursos de protección contra la central, entre ellos el interpuesto por Oceana, y revirtiera la aprobación que el Comité de Ministros dio al proyecto determinando que esta fue «arbitraria e ilegal».
El director ejecutivo de Oceana, Alex Muñoz, aseguró que «el Gobierno está resguardando los intereses corporativos de Endesa y las empresas mineras en vez de conducir una política energética verdaderamente orientada al bien común. Si el proyecto Punta Alcalde se cae será simplemente por ser muy contaminante y por el actuar ilegal y arbitrario del comité de ministros».
En este mismo punto, el subsecretario del Medio Ambiente, Ricardo Irarrázabal, anunció que el comité de ministros apelará la resolución ante la Corte Suprema, argumentando que la aprobación de Punta Alcalde fue legal, no arbitraria, y que no atenta contra el derecho a vivir en un ambiente libre de contaminación ya que, según dijo, la termoeléctrica incluso mejorará la calidad del aire en Huasco.
Por su parte el ministro de Economía, Félix de Vicente, defendió Punta Alcalde afirmando que en el país existe un «problema eléctrico grave. Chile es de los países que tiene el mayor costo de electricidad y ese costo lo estamos pagando tanto nuestras producciones que se exportan al mundo como todos los chilenos en la cuenta de luz mes a mes».
Por otro lado, el director ejecutivo de Oceana, Alex Muñoz explicó que «si las empresas presentaran proyectos de generación amigables con el medioambiente y las comunidades serían aprobados rápidamente. Chile tiene un potencial enorme para generar energías limpias que puedan satisfacer gran parte de la demanda eléctrica a través de fuentes renovables no convencionales sin que esto implique un aumento del precio de la electricidad para los usuarios».
